A pesar de que desde mediados del mes de junio del año en curso el gerente de transporte de Petróleos Mexicanos (Pemex) Transformación Industrial asegurara que la Refinería de Dos Bocas ya producía y vendía petrolíferos en los sitios cercanos, y hasta el propio presidente Andrés Manuel López Obrador declarara a finales de ese mismo mes que la factoría levantada en el municipio de Paraíso ya estaba produciendo, en el Sistema de Información Energética a cargo del propio gobierno federal no aparece ningún dato referente a la refinería Olmeca de Dos Bocas, por lo que no registra ni un litro de algún petrolífero salido de la nueva refinería mexicana durante el sexto mes del año.
Lo anterior de acuerdo a los datos publicados por la Secretaría de Energía (Sener) en el Sistema de Información Energética que en su último corte de fecha 30 de junio del 2024, registra una procesamiento de 867 mil 615 barriles diarios de petróleos en las refinerías existentes en México: Cadereyta, Madero, Minatitlán, Salamanca, Salina Cruz, Tula e incluso la refinería Azcapotzalco, que fue cerrada a finales del siglo pasado, aparece en el reporte del gobierno federal aunque con cero producción; mientras que las restantes reportan mayor o menor producción de Gas seco y licuado, gasolinas, querosenos, diésel y asfaltos.
En el reporte publicado por el gobierno federal destaca la procesadora de hidrocarburo de Salina Cruz, que durante junio de este año refinó 227 mil 105 barriles diarios de petróleo, mientras que la instalada en Minatitlán es donde menos se procesó en ese mismo mes, con 110 mil 791 barriles diarios de petróleo.
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Sin embargo, en el informe publicado en los primeros días de esta semana no figura la producción de la Refinería Olmeca de Dos Bocas, declarada por Leopoldo Figueroa, gerente de transporte de Pemex Transformación Industrial, que a mediados del mes de junio mencionó que la nueva refinería ya estaba produciendo y vendiendo diésel en expendios cercanos a la procesadora.
No solo eso, el propio presidente López Obrador afirmó en gira por Yucatán realizada a finales del mes de junio, que la refinería de Paraíso ya estaba produciendo. Sin embargo esta producción declarada por el funcionario de Pemex y por el primer mandatario no es reportada en el Sistema de Información Energética, donde hasta la extinta refinería Azcapotzalco continúa apareciendo en nombre, mientras que la nueva Refinería Olmeca ni siquiera eso se ha merecido: Que su nombre aparezca en los reportes oficiales de producción de petrolíferos.
Mucha expectativa, pocos resultados
La refinería Olmeca, ubicada en Dos Bocas, municipio de Paraíso, fue inaugurada el 1 de julio de 2022. Se trató de un evento simbólico para cumplir con los tiempos comprometidos desde la campaña de López Obrador, ya que la obra aún permanecía en etapa de construcción.
Un año después, apenas estaba lista para iniciar los procesos de prueba, los cuales se fueron postergando en diversas ocasiones.
En enero de tanto el presidente como el director de Pemex Octavio Romero Oropeza, aseguraron que se estaría refinando el 28 de febrero, aunque aún por debajo de su meta, de 280 mil barriles diarios, lo cual tampoco se cumplió.
Posteriormente directivos de Pemex dijeron que la refinería empezaría a producir diésel a fines de mayo y que le seguiría gasolina, aunque nunca dieron a conocer públicamente cuánto crudo ha recibido hasta ahora la nueva refinería.
Con esta obra, el gobierno federal pretendía aumentar la producción de combustibles en el país, debido a que la importación de estos llegó al 77 por ciento.
Una última fecha dada por Romero Oropeza, fue que la refinería Olmeca de Dos Bocas arrancaría sus operaciones al 100 por ciento de su capacidad el pasado 24 de junio de 2024, a casi dos años de que fue inaugurada y a casi cinco de que se comenzó a construir.
Un mes más tarde, el presidente López Obrador señaló una vez más que la Refinería comenzaría a producir por completo a partir del próximo sábado 3 de agosto.
Indicó que la refinería Olmeca alcanzaría una producción completa de 260 a 260 mil barriles diarios de combustible.
Durante una conferencia mañanera, López Obrador manifestó que actualmente el 75 por ciento de los ingresos de Pemex provienen de las ventas de hidrocarburo, donde se incluye la gasolina, el diésel y la turbosina.
Apenas a principios del mes de mayo, el director general de Petróleos Mexicanos Octavio Romero Oropeza señaló que en junio se estaría alcanzando el cien por ciento de la capacidad de operación de la Refinería de Dos Bocas, que estaría procesando 340 mil barriles.
Asimismo, dijo que desde el punto de vista de construcción la refinería está totalmente construida, ya que se encontraban listas las 18 plantas que la conforman.
De acuerdo al director de Pemex, la inversión de la refinería Dos Bocas alcanza los 16 mil 816 millones de dólares, aunque el presupuesto inicial contemplaba sólo de 8 mil millones.
Cabe señalar que la construcción de la refinería Olmeca inició el 1 de agosto de 2019 y se inauguró el 1 de julio de 2022.
Impacta refinería al medio ambiente
Pese a que no ha producido ni un solo litro de gasolina hasta el momento, las zonas aledañas ya registran un impacto ambiental negativo, de acuerdo a pescadores y pobladores de villa Puerto Ceiba y del ejido Andrés García La Isla.
Esto debido a que por segunda ocasión en menos de una semana, habitantes de comunidades cercanas a la Refinería de Dos Bocas denunciaron la contaminación del Río Seco, cuyas aguas amanecieron de un color café, que en ocasiones se torna rojizo en algunas zonas.
Dicho fenómeno se sumó a la mortandad de peces registrada una semana antes en la Isla Andrés García, situada a 6 kilómetros de la Refinería.
“Desde que se echó a andar la refinería el color empezó a cambiar, pero nunca se había visto de este color”, comentó Gabriel “N”, encargado de un restaurante turístico situado en la zona.
Indicó que esta situación les ha afectado mucho, y se debe a que el agua ya no tiene salida debido al taponamiento que se hizo para la construcción de la Refinería.
En la zona hay unos 10 establecimientos de este giro, a quienes las ventas les ha disminuido un 30 por ciento.
Por su parte, Elías de la Cruz, operador de un catamarán turístico, opinó que esto es un efecto de la refinería.
Como integrante de la Federación Turística Bucaneros, dijo que en 15 años no había visto algo similar: “Toda la gente está extrañada; según lo que decimos siempre es contaminación, pero qué cosa lo contaminó, aunque siempre aquí ha habido afectaciones, cuando hay alguna actividad de los mechones, cae lluvia ácida o petróleo crudo y eso ha afectado, al menos teníamos granjas ostrícolas donde se recolectaban larvas de ostión, pero tiene tiempo que no existe”, aseguró.
En cuanto al color de las aguas, dijo que desde hace semanas empezaron a ver algunos cambios, aunque ahora está más intenso y se ha tornado achocolatado.
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Una semana antes, pescadores de la Isla Andrés García denunciaron mortandad de peces en el río Seco del municipio de Paraíso.
Los pescadores estimaron las pérdidas por la cantidad de peces muertos en unos 150 mil pesos.
Esto debido a que tuvieron que desechar en un día cerca de una tonelada de diversas especies.
La refinería de Dos Bocas se localiza a unos 6 kilómetros de ese sitio en donde hay unas 200 familias de pescadores.
Los denunciantes aseguraron que los peces están llenos de aceite y grasa, mientras que el afluente despide olor a azufre y gas, por lo cual solicitaron a las autoridades investigar las causas de esta mortandad.
