I
La pregunta resume todos los miedos, pero también las esperanzas de los villahermosinos más necesitados de ayuda. Ambas emociones se mezclan en promiscua, catastrófica revoltura.
Son las 11:30 horas del viernes 6 de noviembre. A bordo de un taxi, viajan, además del chofer, una mujer cuyo destino es el mercado La Sierra y un empleado de una clínica del IMSS número 39.
—¡Será que nos vamos a ir al agua como en el 2007? —pregunta la mujer cuando observa el creciente vado, de unos 30 centímetros de altura, que se ha formado en la carretera Villahermosa-Teapa, en las inmediaciones de la curva conocida como La Majahua.
—¡No estás oyendo que me van a descontar el día? Estos pinch... jefes... lo malo es que si llega algún otro empleado que viva de por acá, la jefa va a decir: ¿Qué? ¡Y cómo él sí pudo pasar y tú no, siendo que viven por el mismo rumbo? —exclama el otro pasajero.
El chofer se queja de la larga fila de vehículos que intentan pasar. En todos lados se escuchan quejas, a su vez, de que la lluvia no pare. Otros más, los ciudadanos más duchos en hidráulica y manejo de presas, despotrican contra la CFE y sus decisiones de inundar a Tabasco con cíclica persistencia.
Los ánimos se han desbordado, como el agua.
Y mientras tanto, el gobernador del estado de Tabasco, Adán Augusto López Hernández, no acierta a dar una respuesta contundente al naufragio. Contra sus declaraciones, el Sistema de Presas del Alto Grijalva ha determinado elevar a mi 500 metros cúbicos por segundo la extracción de Peñitas, por lo que sólo acierta a señalar que "estamos en el punto más crítico de las lluvias en este mes de noviembre".
—¡Será que nos vamos al gua como en el 2007? —vuelve a preguntar la mujer.
El empleado del IMSS se rinde y dice:
—Mejor me voy a trabajar. Si no trabajo me descuentan compensaciones y entonces sí me revientan. Los líderes sindicales no nos defienden. Nos dicen que faltemos y ya. ¡A de ser que ellos nos van a reponer el descuento!
II
Dicen que el "hubiera no existe", y eso mismo se pregunta Jorge 'N', empleado de una tienda de artículos para el hogar del centro histórico. Razona:
—Si no se anduviera inundando, pues entonces la gente andaría pensando en que ya es viernes de rajar trago; pero no, ahora hay que pensar en alzar las cosas para que no se mojen.
Lo dice al pasar, como un personaje garciamarquiano, mientras mira cómo pasan los camiones con arena rumbo al centro, para tratar de apuntalar la muralla erigida por Andrés Granier para salvar a la ciudad de irse a pique.
La ciudadanía empezó a alarmarse desde muy temprano y abandonaron sus oficinas y locales.
El Malecón, una vez más, es una trinchera a defender. Si se pierde, "igual que en el 2007", se pierde el centro, el corazón de la vieja, húmeda Villahermosa.
III
El imaginario popular y los memes "inundan" (sí, con toda la ironía implícita del término) las redes. Titánic, Fondo de Bikini, Water World, Granier personificado como Aquaman, Evaristo a mitad de una carcajada y exclamando; "todos flotan".
Pero las redes, que no perdonan, enfocan sus baterías hacia el presidente de la república, Andrés Mnauel López Obrador, quien este día ha exclamado sobre la situación que se vive en su estado natal:
"Paisanas, paisanos tabasqueños: están creciendo los ríos y sigue lloviendo. Manténganse informados y por precaución si viven en zonas bajas, mejor busquen refugios en albergues o con familiares que tengan casas en zonas altas. Aunque se afecten muebles, viviendas y otros bienes, lo principal es la vida, lo material se repone y nosotros les ayudaremos siempre".
Es un "sálvese quien pueda", critica uno en las redes. Y de ahí hacia abajo, los comentarios críticos se disparan.
—¡En el 2007 nos ayudaron más! —señala el señor Jacinto Maldonado, quien afuera de su estanquillo rememora; —En el 2007 dieron cheques de 10 mil pesos a los damnificados y nadie se quejó de no haber alcanzado. Los censos fueron eficientes. El Plan DN-III se aplicó bien. Salimos rápido de la tragedia. Ahora que el presidente es tabasqueño, llevamos un mes inundándonos, censaron con las patas para favorecer a morenistas y compadres, el dinero ya no alcanzó porque perdió poder adquisitivo y al presidente le vale gorro y no se parece por Tabasco cuando (Felipe) Calderón (Panista) vino varias veces al estado a supervisar la contingencia. ¡Al agua como en el 2007, o peor, pero de ayuda, nada!