El 18 de marzo del año 2020 se dio a conocer el primer caso positivo a Covid-19 en Tabasco, en una fémina que regresaba del viejo continente. Con ella se desató una serie de acciones que han impactado en la entidad y no solo por la propia enfermedad del virus del SARS-CoV-2, sino algunos de ellos referentes a la utilización de recursos públicos y otros sobre las decisiones tomadas en plena crisis de la enfermedad.
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Los datos de la Secretaría de Salud del estado de Tabasco muestran que al 17 de marzo del presente año se han registrado 189 mil 546 casos positivos al virus amarillo y con 6 mil 204 personas que perdieron la vida por las complicaciones de la nobel enfermedad, sin embargo, para la Dirección General de Epidemiologia de la Secretaría de Salud Federal, las muertes a causa del coronavirus pueden ser mayores a los registrados por el gobierno estatal. Para la dependencia federal en Tabasco se han registrado 10 mil 307 decesos adicionales a los esperados, entre los que se encuentran las 6 mil defunciones por Covid19, por lo que hay 4 mil muertes más de las que en condiciones normales hubieran muerto en estos dos años de pandemia. Las que no ocurrirían sin la presencia del Coronavirus. Las causas especificas no se conocen. Pero entre ellas se encuentran las personas que contrajeron el virus y nunca se dieron cuenta y aquellos que se resistieron acudir a un hospital por el miedo a ser intubados, acción que se llego a considerar sinónimo de muerte.
En cuanto a los casos positivo registrados al último corte de este mes, 13 mil 29 se registraron en menores de edad, desde recién nacidos hasta los 17 años. De los cuales 32 fallecieron, siete de ellos recién nacidos. Así mismo, al 17 de marzo de este año, mil 587 mujeres en algún estado de gestación contrajeron el virus, 10 de ellas perdieron la vida en la lucha por recuperar su salud.
Los datos oficiales muestran que el número de personas que fueron intubadas para ayudarlas a recuperar su salud, fue de mil 48, de los cuales 825 ya no lograron salir del área de cuidados intensivos.
La pandemia también le cayó como anillo al dedo a algunos de los proveedores del estado que vieron en la desgracia la oportunidad de hacer dinero. El propio gobernador del estado acepto en ese entonces que, en las compras de ventiladores, mascarillas, oxímetros y otros materiales para atender los casos de Covid19, se pagaron a sobreprecios dado el interés en la salud de los tabasqueños “no escatimamos recursos”, señalo en su momento el hoy titular de la Secretaría de Gobernación, Adán Agusto López Hernández. Se llegó a registrar a un proveedor que después de dedicarse a la venta de forraje y medicinas veterinarias, incursionó en la venta de equipos medicos a sobre precios, entre ellos ventiladores mecanicos que fueron pagados a precio más altos que los que el hijo de Manuel Bartlett vendió al IMSS y que fueron un escándalo a nivel nacional hasta que intervino la Función pública. En Tabasco no paso nada.
A pesar de que durante el año 2020 la mayor parte de las dependencias estatales bajaron cortina para evitar que la ciudadanía se movilizara a realizar algún trámite, los recursos destinados ese año para su funcionamiento se gastaron sin generar un solo peso de ahorro. La eficiencia en el gasto de las oficinas gubernamentales no fue cuestionada por los órganos revisores, ni por su contrapeso, el poder Legislativo, quien califico las cuentas públicas de ese año sin ningún problema. A pesar de que se demostró, por ejemplo, que en el caso de los Olmecas de Tabasco se ejercieron las más de dos docenas de millones de pesos que se les entrego, repartiendo ese dinero entre sus jugadores para que se fueran a sus casas a pasar la pandemia, sin preocupación alguna.
Hay más en esta vertiente. A pesar de la reducción de la actividad gubernamental que no fue impedimento para que se gastara todo el recurso presupuestado, a pesar de la llegada de recursos federales, adicionales a los presupuestados, para la atención de la pandemia, esto no fue suficiente para evitar que el titular del poder ejecutivo del estado solicitara empréstitos a corto plazo. Durante el año 2020 el monto solicitado por deuda a corto plazo fue de 3 mil 300 millones de pesos y durante el año 2021 este tipo de endeudamiento llego a más de 4 mil millones de pesos y una autorización de los diputados locales de mil 500 millones de pesos en deuda a largo plazo. Los legisladores no vieron nada raro en qué el gobernador solicitará más deuda a pesar de los montos de recursos que se están ejerciendo, pero que parecen que no son suficientes ante las necesidades de la burocracia estatal. El argumento para contraer deuda a corto plazo fue pagar los bonos navideños, los pavos y demás prestaciones de fin de año a los trabajadores del gobierno.
La pandemia del Covid19 no solo afecto a los tabasqueños. La Secretaría de salud reporta que en los más de 700 días que ha transcurrido de la peste mundial, en la entidad se han enfermado 350 personas provenientes de diferentes partes del orbe. Los mismos que fueron atendidos en los hospitales del estado.
Por su parte, la vacuna contra el covid19 empezó a principios del año 2021 y fue la oportunidad para que algunos funcionarios estatales abusando de su posición de poder se aplicaran el biológico a pesar de que no era su turno. El gobierno del estado anuncio que serían sancionados, pero los datos obtenidos por El Heraldo de Tabasco vía transparencia demostraron que tal sanción solo fue una simulación, los funcionarios estatales continuaron cobrando sus salarios de forma normal. El anuncio de castigo solo fue para tratar de mostrar que los abusos no son tolerados en la actual administración. Sus propios datos oficiales los desmintieron.
Entre las cosas han quedado sin respuesta hasta este momento se encuentra el uso del protocolo de atención a enfermos por Covid19. Después de que a nivel federal se dio a conocer el protocolo que priorizaba el uso de equipos médicos en personas con más posibilidades de recuperarse, sobre aquellos con las llamadas comorbilidades; en la entidad se descartó su uso, aunque los datos demostraron que durante el primer año del encierro mundial la mayoría de las muertes ocurrieron en personas mayores de edad con comorbilidades. ¿Se uso este protocolo?. Hasta ahora no hay un reconocimiento oficial.
Es de las preguntas que quedaran sin respuesta, como la reducción de las restricciones sanitarias en plena campañas electorales durante el año 2021, cuando ya se había iniciado la tercera ola de casos, que llevo a abarrotar los cierres de campaña con sus políticos preferidos mientras estos traían colgado del pecho el aparato que filtra su entorno y evita el pase del virus al portador. Sobra mencionar que lo trágico de la tercera ola que deja con la sensación que pudo ser evitado, pero importaron más las elecciones, el poder.
Al cierre de la cuarta ola de casos en Tabasco, con la mayor parte de los habitantes del estado con alguna dosis aplicada de la vacuna anticovid, el color verde en el semáforo epidemiológico y la muerte de personas vacunadas previamente, la mayor parte de las escuelas con clases presenciales, se habla de la posibilidad de ir retirando las recomendaciones mantenidas durante los dos años de la enfermedad mundial, entre ellas el uso de la mascarilla. Dependerá de cada persona mantener las recomendaciones ante un mal que, si bien se ha reducido, no ha terminado.
