El psicólogo Francisco Hernández mencionó que el encierro ha provocado el deterioro mental en la población tabasqueña, lo que ha creado conductoras de miedo o rechazo a salir de casa, síntomas que son parte de “El Síndrome de la Cabaña”.
En días anteriores se dio a conocer que los aumentos en los casos de depresión y tendencias al suicidio en los tabasqueños, fueron aumentando hasta en un 500 por ciento, esto afectando a adultos, jóvenes y niños, donde también aumentaron categóricamente las consultas con diversos especialistas de la salud mental.
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Cabe recalcar, que al inicio de la pandemia muchos tabasqueños cerraron forzosamente sus negocios y algunas empresas tuvieron que cerrar temporal o definitivamente, afectando a casi la mitad de la población en la entidad. Hace unas semanas, la Secretaría de Salud y el Gobierno del Estado, dieron a conocer el regreso al semáforo verde, aunado a seguir la mayoría de las restricciones sanitarias, como el control de los horarios de apertura y cierre de comercios, así como también los protocolos de salud.
Todo este encierro, llevó al deterioro inminente de la salud mental en la población tabasqueña. El psicólogo Francisco Hernández, en entrevista para El Heraldo de Tabasco, nos comentó que dada la situación anterior, ante el encierro que vivieron la mayoría de los tabasqueños, se creó un síndrome conocido como “El síndrome de la Cabaña” el cual consiste en una persona que experimenta miedo o rechazo ante la necesidad de exponerse y salir de casa después de un largo período sin hacerlo. Algunas reacciones se pueden presentar en el ámbito emocional o con sintomatología cognitiva, así como características fisiológicas; taquicardia, sudoración y dificultad motora. También es posible padecer trastornos de ansiedad, depresión y estrés.
En lo que respecta al confinamiento, el especialista en salud mental, señaló que este encierro que se suscitó, llevó a las personas que normalmente eran el pilar y sustento de su familia, a un estado activo de ansiedad, perdiendo categóricamente la concentración en el tiempo presente, como lo señala.
Así mismo, exhortó a la población tabasqueña tomar medidas rápidas ante la aparición de éstos síntomas de ansiedad como son: La falta de concentración, pensamientos recurrentes acerca del pasado y el futuro, incertidumbre y cambios en el estado de ánimo, esto provocando no estar fijado y concentrado en el presente, señaló. También indicó acudir a especialistas y profesionales de la salud mental, para evitar que esta ansiedad se convierta en la temible pero no menos importante depresión.
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“Las actividades que recomiendo para evitar que la ansiedad se convierta en depresión son: El ejercicio, dormir bien, tomar mucha agua comer saludable, ya que en la alimentación; está el secreto del estado de ánimo, somos y pensamos como lo que comemos, además de que empezando el semáforo verde, la gente está empezando a reconectarse de nuevo con el mundo exterior, por lo que poco a poco, uno debe de no tener miedo a salir, tomando siempre las medidas sanitarias para evitar los contagios que aún persisten”, indicó.
En un sondeo que se realizó a la población tabasqueña, María “N” nos cuenta que para evitar la ansiedad y depresión, realiza actividades deportivas en las mañanas y las noches, ya que tras el encierro y el regreso a la nueva normalidad, se le dificultó mucho adaptarse al mundo exterior.
Por su parte Jorge Lopez, señaló: “ante el confinamiento, me enfermé de ansiedad por la preocupación de pensar si la empresa en la que actualmente laboro iba a cerrar, no podía dormir bien y cada vez me sentía más irritado, tuve que empezar a hacer mucho ejercicio para cambiar mi manera de pensar y alimentarme con comidas más saludables, frutas, verduras y mucha agua, cambié mis hábitos de descanso, que hasta el día de hoy me han funcionado de maravilla”, finalizó.