La Auditoria Superior de la Federación detectó un pago irregular por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex) Corporativo relacionado con la limpieza y el desmonte del predio que alberga a la Nueva Refinería de Dos Bocas, municipio de Paraíso, Tabasco. Con esta acción, el organismo revisor confirma que la obra federal dió inicio sin contar con ningún permiso ambiental para su construcción.
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La ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente señala que las obras relacionadas con industria del petróleo deben presentar a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) una evaluación de impacto ambiental, mediante la cual, la dependencia federal establecerá las condiciones a las que se sujetarán las obras y actividades que puedan causar desequilibrio ecológico.
El procedimiento es anterior a cualquier acción del proyecto, ya que la autoridad, en uso de sus facultades puede solicitar adecuaciones o de plano negar el permiso de la obra.
La Nueva Refinería Dos Bocas, al ser una obra petrolera, necesitaba contar con la autorización ambiental antes de arrancar actividades. Sin embargo, esto no sucedió.
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La Auditoria Superior de la Federación señala en su tercer informe correspondiente al ejercicio fiscal 2020, que Pemex Corporativo pagó 2 millones 835 mil pesos en dos conceptos para la limpieza del predio, la 159 relacionada con la “Limpieza y desmonte del terreno con maquinaria, en zona de pastizal, maleza o de monte bajo” y la 160, “Limpieza y desmonte del terreno con maquinaria, en zona de selva o bosque”, actividades que se realizaron en el periodo del 1 de septiembre y el 31 de diciembre de 2019, y pagadas con recursos del ejercicio fiscal 2020.
De esta manera, el inicio de construcción de la refinería Dos Bocas contravino lo marcado en la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente ya que solo contaba con un permiso municipal para la limpieza y desmonte del predio expedido por la Dirección de Protección Ambiental y Desarrollo Sustentable del municipio de Paraíso el 2 de septiembre del año 2018, apenas unos días después de otorgarse la constancia de ganador al actual Presidente de México. Mientras que la autorización de impacto ambiental fue autorizada por la misma Federación en agosto del año 2019. Casi un año después de iniciar actividades.
Cabe mencionar que desde los primeros días del mes de septiembre del 2018, la actual Secretaría de Energía y responsable de seguimiento a la construcción de la obra en Tabasco, Rocío Nahle, realizó diversos viajes a la zona de Dos Bocas, acompañada del entonces ganador de la gubernatura, Adán Augusto López Hernández.
La ASF señala que en el desmonte del predio que ocupa la Refinería, ahora bautizada como Olmeca, debió de utilizar sólo el concepto “Limpieza y desmonte del terreno con maquinaria, en zona de pastizal, maleza o de monte bajo” y no el de “Limpieza y desmonte del terreno con maquinaria, en zona de selva o bosque”.
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Cabe recordar que en el mes de junio de 2019, el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) publicó un documento en el que se advertía que por su ubicación geográfica, el proyecto estaría a merced de inundaciones por lluvias, huracanes o marejadas.
En su momento, también la ASF señaló que por la premura con que se iniciaron las obras a cargo de la Secretaría de Energía (Sener), no se consideraron las medidas de mitigación a la afectación ambiental en la zona.
Además de los daños ambientales, el día de ayer 21 de febrero se informó que al complejo petrolero se le realizaron seis auditorías, con observaciones por 59.2 millones de pesos por inconsistencias entre los montos estimados contra los realmente ejecutados; pagos indebidos en categorías de profesionistas senior y junior, sin acreditar su especialidad; pagos en exceso en el concepto de desmonte en zonas de selva; diferencias entre las cantidades pagadas contra las sumas consideradas en 14 precios unitarios; y adjudicación de contratos por invitación y por asignación directa, en vez de la celebración de concursos abiertos.
Ante esto, la secretaria de Energía, Rocío Nahle García justificó que “la magna obra no tiene retrasos, sobre costos y que las observaciones realizadas están solventadas”.
Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo sobre los resultados de los informes que realizó la ASF que “las irregularidades se van a ir aclarando” y resaltó que los resultados son preliminares.