El cierre temporal de los tramos de malecón Carlos A. Madrazo mantiene paralizada la actividad, por un lado se ven afectados los negocios y por el otro, los franeleros que trabajan en la zona.
Los propietarios de los establecimientos comerciales aseguran que sus ventas han caído considerablemente desde que las autoridades determinaron cerrar ante el riesgo de un posible desborde del río Grijalva.
En tanto, los llamados "viene viene" o franeleros, que se dedican a ayudar a los automovilistas a aparcar sus unidades en los espacios permitidos de la avenida, se quedaron sin trabajo temporalmente.
Don José quien lleva años laborando en el lugar, aseguró que su único sustento es el dinero que recibía de los dueños de los vehículos, sin embargo, aunque sigue llegando, se va a casa con los bolsillos vacíos.
"Pues no tenemos chamba con el cierre del malecón, aquí ayudamos a la gente a estacionarse y además les cuidamos sus carros porque no hay vigilancia, pero ahora estamos amolados, no estamos sacando nada", expresó.
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