Millonarias inversiones han realizado el gobierno de Tabasco y el ayuntamiento de Centro en la infraestructura policial de Villahermosa, sin embargo muchas casetas de vigilancia siguen en el completo abandono e incluso se han convertido, irónicamente, en refugio de personas en situación de calle o presuntos delincuentes.
De acuerdo con el Censo Nacional de Seguridad Pública Estatal 2022 publicado por el INEGI, Tabasco tiene 37 de estas casetas, la mayoría en la capital del estado. Al menos 14 fueron rehabilitadas desde el trienio de Gerardo Gaudiano Rovirosa (algunas incluso mantienen el logo que dejó esa administración), pero la mayoría no fueron ocupadas.
Ésta es una de las más sentidas demandas de la población de colonias populares de la capital tabasqueña, donde a diario se registra un gran número de delitos, principalmente robo y asalto. Los vecinos de la colonia Carrizal piden a gritos desde hace muchos años la reactivación de la caseta de vigilancia, conocida por ser "cueva" de ladrones y haber sido vandalizada en muchas ocasiones.
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Las autoridades hicieron caso omiso a las reiteradas denuncias de lo peligroso que resulta salir a la calle con el temor de ser víctima de la delincuencia, y más aún cuando no hay apoyo policiaco cercano. Como resultado de la desidia de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), una joven de nombre Ana Julia fue encontrada muerta en un predio solitario.
Vecinos del lugar señalaron que a raíz del lamentable hecho se pidió a la dependencia reactivar la caseta con elementos policiacos, pero hasta el momento nada. Ciertamente le acaban de dar una "manita de gato", pero sin tener asignado al menos a un agente, es como si no existiera. Comentaron que los delitos de mayor incidencia en la zona son asalto a transeúntes y robo a casa habitación, aunque también se han reportado enfrentamientos a balazos.
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El propio titular de la SSPC, Hernán Bermúdez Requena se refirió en diversas ocasiones a la modernización de estos espacios para la concentración de elementos de la Policía Estatal. En su momento, habló de la revisión de al menos catorce de éstas para determinar cuáles son estatales y cuáles del municipio de Centro para proceder a rehabilitarlas.
En septiembre de 2021, el gobernador Carlos Manuel Merino Campos inauguró con bombo y platillo la rehabilitación de ocho casetas, con una inversión de 8.3 millones de pesos Dichas casetas son la llamada Base VIII, Villa Parrilla, La Manga I, Villa Ocuiltzapotlán, Campestre, Petrolera, Infonavit II y Gaviotas Norte.
En su discurso, el mandatario aseguró que "estas instalaciones permitirán combatir de manera rápida y efectiva las incidencias, facilitando el trabajo policial". No obstante, otras permanecen en el completo abandono, aún con el presupuesto anual aproximado de la dependencia de 2 mil 625 millones 478 mil 681 pesos.
Tal es el caso de la que se ubica en la esquina de Centenario Instituto Juárez y Girasol del fraccionamiento Tulipanes, junto al parque La Pólvora, donde se han registrado hechos delictivos, sobre todo contra los deportistas que por las mañanas y las noches acuden a hacer ejercicio al lugar. Basta recordar el sonado caso de un sujeto de nombre Osmar “N”, quien mató y prendió fuego a su novia, y que huyó del país, siendo detenido en Houston, Texas y puesto a disposición de las autoridades locales.
Pero no puede haber una actuación preventiva a tiempo para evitar un delito de tal magnitud, cuando ni siquiera funciona la caseta y la policía brilla por su ausencia. Mónica López, quien es vecina de la zona, indicó que tiene cinco años viviendo en el fraccionamiento y jamás ha visto a un solo elemento policíaco en la caseta.
"El asunto es que los vecinos se quejan de que asaltan por las noches, aprovechando que no hay vigilancia y que es un lugar solitario por lo regular", puntualizó. La colonia Municipal padece de lo mismo, pues hay una caseta en el parque localizado en José Guimond y Mariano Arista, pero permanece cerrada desde hace mucho tiempo.
"Llegan muchos indigentes por las noches a tomar, incluso a drogarse y no hay autoridad que haga algo", comentó la señora Patricia Torres, habitante del lugar. Añadió que la caseta de vigilancia fue construida en el trienio de Gerardo Gaudiano Rovirosa, hubo presencia de elementos de la SSPC por poco tiempo, y hasta el día de hoy no se para por ahí ni un solo policía.
Por otra parte, y después de las múltiples denuncias hechas ante los medios de información, por fin está siendo rehabilitada como parte del programa de modernización de la infraestructura, la que se encuentra en el parque de Tierra Colorada y que permaneció en el olvido mientras gobiernos iban y venían.
Aunque según los comerciantes de los alrededores, lo que hay que ver ahora es si la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana designará a parte de su personal para que se haga cargo de mantener la vigilancia y salvaguardar a los habitantes.
La señora Carmen Alejandro, que atiende un puesto de antojitos desde hace más de treinta años justo frente a la caseta, aseguró que por lo regular está vacía. "A veces llegaba un policía, a veces tardaban en llegar varios días", refirió. En contraste, algunos conjuntos habitacionales de zonas exclusivas de la ciudad e instituciones sí cuentan con personal policíaco las 24 horas, en diferentes turnos.
Para la presidenta de Observatorio Ciudadano, Julia Arrivillaga Hernández el hecho de que las casetas estén abandonadas se refleja en la baja percepción sobre seguridad que tienen los ciudadanos. "De acuerdo con datos de la encuesta del INEGI, ocho de cada diez ciudadanos que caminan por las calles se sienten inseguros y sienten que pueden ser víctimas de un delito al andar en los espacios públicos, y esto de alguna forma es el reflejo del abandono que hay en cuanto a las instalaciones de la policía", destacó.
De nada sirve -añadió- establecer y poner una caseta si no van a tener elementos vigilando esos espacios públicos; está la instalación física, pero no hay elementos de seguridad que den servicio a los ciudadanos. La especialista consideró que estas instalaciones pueden ser de gran ayuda, tomando en cuenta que cuando una persona es víctima de un ilícito lo primero que busca es a la autoridad más cercana, que en este caso es la policía.
"Serían de mucha ayuda y podrían generar mayor seguridad a los ciudadanos sobre todo por la noche, si fueran funcionales sería de mucha ayuda", expresó.