Buscan el sustento

Los hermanos Jonás ‘N’ y Alberto ‘N’, recorren las calles del Centro Histórico vendiendo dulces.

Raquel May Olán

  · domingo 7 de abril de 2019

Ante las altas temperaturas, toman breves descansos para regresar a vender./ Javier Chávez

Las calles del Primer Cuadro de Villahermosa están plagadas de menores que deben trabajar en condiciones de explotación infantil, para colaborar en el sustento de sus hogares. Tal es el caso de los hermanos Jonás ‘N’ y Alberto ‘N’, que venden dulces en el Centro Histórico de Villahermosa.

Este par de pequeñitos nacieron en Tabasco, sin embargo, sus papás son originarios del vecino estado de Chiapas, en tanto, a su corta edad se dedican a recorrer las arterias de la Zona Luz con su canasta de dulces, para poder colaborar en los gastos de su casa.

Con 10 años Jonás y 11 Alberto, desde las 6:00 horas se levantan para llegar a la zona Centro alrededor de las 8:00, desayunar y comenzar a trabajar, indicaron escuetamente para este medio de comunicación.

“A las seis me levanta mi mamá, y venimos comemos y luego ya nos vamos a trabajar todos los días”, aseveraron.

Ayer con las altas temperaturas el calor sofocaba a los hermanos, no obstante, después de tomar un breve descanso de cinco minutos en las bancas de la zona luz, regresaron a su labor con su canasta colgada a un costado, en donde además de dulces venden cigarros y pulseras que su mamá teje.

Los menores provienen de una familia de cinco hermanos, el resto de los tres tienen entre uno y cinco años, por lo que aún no les toca trabajar.

Jonás y Alberto forman parte de las estadística de al menos 70 mil niños deben trabajar en condiciones de explotación infantil, para ayudar en el sustentos de sus hogares, debido a la crisis económica que impera, tal y como lo ventiló Alejandra Arias, directora de la asociación civil ‘Aldea por los Niños’, al referir que esto se da en su mayoría a partir de los 8 años.

También engrosan el padrón de los 478 mil niños en el Estado que viven en condiciones de pobreza extrema, según un estudio realizado por la Organización de las Naciones Unidas.

Cabe mencionar que la activista indicó que dichos menores se encuentran concentrados en la economía informal, vendiendo tortillas en motos o bicicletas, distribuyendo agua en garrafones y hasta manejando pochimoviles, o como estos hermanos que venden dulces.

Finalmente, delineó también que en México el trabajo infantil está prohibido, a excepción de un permiso otorgado por la secretaría del trabajo a partir de los 14 años, siempre y cuando su actividad laboral no afecte su salud y desempeño escolar. Aunque Jonás y Alberto no estudian, ni tampoco tienen 14 años a como dicta la ley.