La Secretaría de Salud del Estado de Tabasco reportó la atención de más de mil casos de niños y niñas violentadas en el estado en el año 2018, mismos que han recibido apoyo de psicólogos para su recuperación.
María Teresa Hernández Bocanegra, coordinadora de los Servicios Especializados de Atención a la Violencia Familiar y Sexual de la Secretaría de Salud advirtió que la naturalización de la violencia en la vida de las niñas, niños y adolescentes es cada vez más común, ya que en la actualidad el uso de la tecnología sin supervisión, acerca actos de violencia a los niños y se fortalece cuando los menores se exponen a abusos físicos y verbales de quienes deberían protegerlos
Explicó que en la actualidad muchos niños, niñas y adolescentes presencian la violencia dentro de sus hogares, usualmente entre sus padres y esto puede afectar su estado de ánimo, su desarrollo y su manera de interactuar con otras personas a lo largo de toda su vida, ya que identifican estos abusos como parte de algo natural y como una forma de lograr sus objetivos.
Señaló que todas las unidades médicas de la Secretaría de Salud cuentan con personal capacitado, los cuales actúan como captadores de casos de violencia física, mental y de abusos sexuales.
La especialista en Salud Mental, exhortó a los padres de familia a mantener un especial cuidado en todo lo que ven los menores, supervisar los contenidos de sus programas favoritos de televisión y videojuegos y mantener una comunicación estrecha que permita la sana convivencia de la familia.
Señaló que la hora de la comida puede ser el momento adecuado en el que pueda establecerse una plática amena que permita conocer si sus hijos están siendo molestados, si sufren algún tipo de violencia en la escuela o de algún compañero o para detectar signos de alerta, los cuales pueden ser un abrupto cambio de conducta, una baja en las calificaciones, un cambio de ánimo o en su forma de interactuar.
“Si un padre de familia nota los signos de alerta, sospecha de algún tipo de violencia o abuso, nos puede contactar en las unidades de Salud, en los servicios de Salud Mental o en el Departamento de Violencia Familiar, nos puede hablar directamente al 3 17 70 49 y nosotros les brindaremos la orientación que requiera”, finalizó la funcionaria estatal.