En un momento histórico, trascendental para la vida pública nacional, el gobernador Adán Augusto López Hernández en representación de los tabasqueños, participó en el informe de actividades del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a un año de la elección que marcó el inicio de la Cuarta Transformación Nacional de México.
López Hernández junto a otros gobernadores del país, respaldó las acciones de gobierno que impulsa el titular del Ejecutivo Federal en materia social y económica a favor de todos los mexicanos, en particular, de la clase más desprotegida y necesitada de México.
Al cumplirse 365 días del triunfo histórico del presidente tabasqueño, el Gobernador se sumó a la fiesta nacional en el Zócalo de la Ciudad de México, donde escuchó atento el mensaje del oriundo de Tepetitán, Macuspana, quien detalló logros alcanzados en los primeros siete meses de su gestión, en los que se han cumplido 78 de los 100 compromisos asumidos en esta misma plaza.
El Gobernador fue testigo del reconocimiento que desde el “corazón de México” López Obrador hizo a los hombres y mujeres de campo y la ciudad, que lo han acompañado siempre con perseverancia para alzar la voz por la justicia y el progreso de la nación.
A 12 meses de la hazaña colectiva el Presidente de la República, reiteró el compromiso de no fallarle al pueblo de México. “Se trata de un desafío mayor pero bastante fecundo, de construir una patria nueva, próspera, democrática, fraterna y soberana”, expresó.
En su informe, “con absoluto apego a la verdad”, resaltó que ya no se tolera ni se permite la corrupción desde la Presidencia de la República, está prohibido el amiguismo, el influyentismo y cualquier otra práctica del antiguo régimen.
Como una estrategia emergente desde los primeros días de su gobierno, informó que se redujo el robo de combustible en 94 por ciento y terminó con el famoso huachicol, con lo que se ahorra más de 50 mil millones de pesos.
Con la firme ideología de que “el gobierno no es para hacerse rico sino para servir al pueblo”, dio a conocer que se suprimió la pensión de cinco millones de pesos mensuales a expresidentes de la República; se bajaron los sueldos de los altos funcionarios públicos y se subió el de la clase trabajadora y en un hecho histórico, aumentó el salario mínimo en 16 por ciento.
Acompañado por su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, comunicó al pueblo mexicano que no han aumentado los impuestos en términos reales, ni se han creado nuevos impuestos. Ha bajado la inflación y se han mantenido los precios de las gasolinas en el país.
En tan sólo siete meses de gobierno, esta administración, ha ahorrado por concepto de compras 113 mil millones de pesos. Este año se invertirán 330 mil millones de pesos en la producción de petróleo, de gas y de electricidad, lo que representa un aumento del 50 por ciento con respecto a lo ejercido para la misma finalidad durante el año anterior. El peso es la moneda que más se ha fortalecido en el mundo con relación al dólar, manifestó el Presidente.
López Obrador resaltó los logros de los programas Sembrando Vida y becas para jóvenes en todas sus modalidades y las pensiones a las personas de la tercera edad y discapacitados, a quienes los recursos les llegan de manera directa y sin intermediarios, con el propósito de desterrar las prácticas de corrupción que había en los programas sociales en el antiguo régimen.
En este sentido, el mandatario federal detalló que este año se invierten 60 mil millones de pesos en los programas de becas, en beneficio de 10 millones de estudiantes de todos los niveles educativos, cifra sin precedentes en el país y garantizó que para el 2021 ningún joven se quedará sin la posibilidad de acceder a un espacio educativo o un puesto en el sector laboral.
Tras convocar a todos los sectores del país a la unidad para lograr el progreso del país con justicia social, López Obrador precisó que todas estas acciones permitieron la creación de 300 mil nuevos empleos en el país en el primer semestre del año.
Al remarcar que posiblemente nunca en comienzo de un gobierno se haya hecho tanto en tan poco tiempo, López Obrador reconoció que hay pendientes, como mejorar el sistema nacional de salud, proyectada de manera universal y gratuita en todo el país; hacer crecer más la economía y erradicar los niveles de violencia que se heredaron del antiguo régimen.
El tabasqueño aseguró que si los mexicanos forjan una conciencia colectiva sustentada en el amor, la justicia y la honestidad, nadie podrá revertirla.
“Este proceso no tiene retorno. Ni un paso atrás. Nada de titubeos o medias tintas. Una cosa es actuar con prudencia, evitar la confrontación y garantizar las libertades que son sagradas y otra cosa muy distinta es la indefinición. Nosotros somos auténticos, pacifistas y transformadores al mismo tiempo. En la defensa de las causas de la honestidad, la justicia y la democracia no somos moderados, somos radicales”, precisó el Presidente ante miles de mexicanos reunidos en la emblemática plaza.
