El gobernador Adán Augusto López Hernández sólo está esperando qué cachar de la Federación y no anuncia medidas propias para reactivar la economía, sostuvo el exdirigente del PRD, Roberto Romero del Valle al lamentar que por privilegiar la economía el mandatario está poniendo en riesgo la salud de los tabasqueños.
Para el también otrora regidor del ayuntamiento de Centro, no es necesario quitar la ley seca ni abrir comercios porque en junio se espera el mayor número de contagios.
“Por decreto dan por terminada la jornada de sana distancia así nada más, cuando se tiene que darse a partir de estudios de expertos; la curva no está aplanada, hay un mayor número de contagios, no se hacen las pruebas con seguimiento para ver en realidad cómo estamos”, expuso.
Entonces –prosiguió- vamos a ciegas a esta nueva normalidad, todo indica que no se está privilegiando la salud sino la cuestión económica, pues a diferencia de otros países de Europa donde la gente tiene sus ahorros, en México vivimos al día.
Enfatizó que la entrada a esta nueva etapa se dio más por presión de los Estados Unidos al gobierno de Andrés Manuel López Obrador partiendo de que México es el gran maquilador de la industria automotriz, que por el hecho de haber superado la emergencia sanitaria.
Asimismo, Romero del Valle apuntó que se esperaba más de los anuncios del gobernador Adán Augusto López Hernández y lo único que se pudo percibir un regreso apresurado que puede ocasionar mayores problemas de salud en el estado.
“Ya regresaron a trabajar a los burócratas del Poder Ejecutivo, sin una buena información, y de manera confusa”, expuso al tiempo de reprobar que Tabasco se esté sujetando a las disposiciones federales y no actúe por decisión propia sobre lo que más conviene a los tabasqueños.
Una insensatez quitar la ley seca
Consideró que en estos momentos no es sensato levantar la ley seca, así como también que empiecen a reactivarse las empresas puesto que se espera el mayor número de contagio de coronavirus en el mes de junio.
A lo que agregó que parece ser que al gobierno estatal morenista no le queda otra alternativa que apresurar el regreso a la normalidad debido al hartazgo de los ciudadanos de estar en confinamiento y sin recibir apoyo, sólo medidas de restricción.