Contrario a visitas anteriores, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no salió por la sala de espera del Aeropuerto de Villahermosa, ya que se fue director al hangar de gobierno para abordar la camioneta que lo esperaba y trasladarse a Palenque, Chiapas, para iniciar una gira por el Sureste del país este fin de semana.
No replicó su famosa frase de que Tabasco es su tierra y su agua, porque efectivamente no se metió entre el agua que tiene inundadas a miles de familias tabasqueñas, no batió lodo, ni siquiera de la camioneta descendió para tomarse fotos y selfies con sus paisanos como lo acostumbra.
Sin embargo, en su gira no contempló a Tabasco, a pesar que se encuentran con más de 600 mil personas damnificadas por las inundaciones en 13 de los 17 municipios.
Tras su llegada al aeropuerto de Villahermosa, López Obrador anunció que será realizará en Tabasco un programa especial de vivienda para las personas que se vieron afectadas con las inundaciones, y que, para ello, se está llevando a cabo un censo de afectaciones.
Al salir del hangar de gobierno, el presidente ordenó que se detuviera la camioneta Suburban que lo trasladaba por cerca de tres minutos, para recibir peticiones de ciudadanos que acudieron al Aeropuerto, realizar anuncios y no dio entrevistas a los medios de comunicación.
No le dio la cara a los tabasqueños, pero si fue a Palenque, Chiapas, posteriormente acudirá a Campeche y Quintana Roo.