Una corriente de más de 100 metros de aguas negras, es la que se observa en la Avenida Gregorio Méndez, la cual pasa frente a la Unidad Médica Familiar ISSET, el Cendi número 4 y juzgados civiles y familiares de la colonia Atasta.
Desde hace tiempo, una alcantarilla es la que ocasiona la fuga de aguas pestilentes, los transeúntes tienen que soportar el hedor, así sea para ir a las oficinas cercanas o tomar el transporte.
En esta parte una función natural del cuerpo, como es respirar, se convierte en un problema por la peste que emana del líquido negro, entre los que se ven obligados a soportar esta desagradable situación están los que se van a realizar la prueba de Covid; negocios de alimentos también son afectados.
Cabe mencionar que este afluente inicia, desde el punto en el que se encuentra un vivero, a un costado de la unidad Médica del ISSET y culmina hasta la calle Huimanguillo, poco más de 100 metros de distancia.
Uno de los franeleros que están por la zona, manifestó que algunas personas se han resbalado en la banqueta, debido a que hay partes en las que está muy resbaloso: “ya al menos unas tres personas se han caído, si observan se ve la lama en la orilla de la banqueta, ya hay personas grandes que se han resbalado”.
Hay que mencionar que este lugar es muy transitado, al haber oficinas en la zona, y aunque la Unidad deportiva del Recreativo no está en uso, al menos su estacionamiento si es ocupado.
Muy cerca de ahí por la avenida Usumacinta, también se observa la fuga de aguas negras, la cual rodea una parte de las instalaciones del 30 batallón de infantería.