Un médico general tuvo que ser hospitalizado luego de ser objeto de agresiones físicas a manos de agentes de vialidad y de la policía tras negarse a dar un “algo” al momento de serle marcado el alto en un filtro de seguridad a la entrada de la ciudad en Balancán.
El doctor Jesús "N" , narra la odisea de abuso policial que vivió en su municipio la tarde de ayer, cuando a bordo de su motocicleta buscaba llegar a su casa procedente del municipio de Tenosique en donde está asignado al hospital general en guardias los días Martes, Jueves y Viernes y se encontró con el retén.
El oficial que lo abordó, le exigió sus documentos; se identificó como médico de los hospitales de Tenosique, de Balancán y del Issste y vino la exigencia de dinero: “Eran aproximadamente las tres y 40 de la tarde, y sin más, el agente me pidió, así, de manera descarada, dinero; que si traía “algo” que le diera y me molestó...”, El doctor, dice que continúo su marcha y fue perseguido hasta la avenida principal de la entrada al municipio; fue copado y tirado de la motocicleta y gracias a que portaba toda la indumentaria, como casco, chamarra, botas, rodillera eso evitó que se lastimara; fue golpeado y sometido “como un perro”, expuso.
Terminé –explica-, luego de que me arrastraron y me estrellaran contra la pared, con una esguince cervical, lesión en la costilla, brazo y muñeca de la mano izquierda, fractura de codo; acabé en el hospital en donde me compañeros me dieron la atención; soy hipertenso y me controlaron.
Cuando fui sometido, lo peor que pudo haber pasado fue el que mi hijo mayor fuera mudo testigo de esta cobarde situación; que viera que me suben a una ambulancia para meterme preso y ver como se despide de su padre que salió a trabajar; que regresaba de trabajar. Ojalá y así pusieran el empeño de atrapar a todos los delincuentes, asesinos, violadores que hay en nuestra región; traigo un dolor profundo que nunca pensé que mi hijo me viera que me llevaran en una patrulla, como un perro... acusa el médico.
Me da coraje –expone- odio, hacia nuestras autoridades, porque nos dañan; abusan y no se vale; pido pues que el gobernador tome cartas en el asunto. Me dedico a trabajar, mis padres siempre me decían que debía estudiar; que debía tener una profesión pero acciones como esta te bajan la moral, pues resulta que tus agresores son la propia autoridad.
Para mí es un día triste; la agresión me daña, me afecta tanto emocional como mentalmente. Estamos actualmente en un proceso contagio al que hay que evitar; estamos exhortando como médicos sobre la sana distancia; trabajamos todos los días haciendo promoción a la salud y todos los días hacemos recomendaciones.
Es necesario que este tipo de situaciones no deben ocurrir; la exigencia de dinero por autoridades para que uno pueda pasar “libremente” un filtro”, es necesario que sean serios y que hagan un trabajo como debe ser y no de forma corrupta como lo aplican.
El médico expuso que dato aparte, hay falta de médicos y él es una baja por al menos una semana y debe regresar lo más pronto posible; no se vale.
Y ya, al final de todo, resultó que el comandante de la policía del municipio de Balancán, buscaba prácticamente obligarlo a que firmara un documento, una
carta responsiva por haber golpeado y lesionado a sus elementos, así de lamentable la situación de corrupción en este cuerpo policial, concluyó.