La Secretaría de Marina (Semar) adquirió 12 dragas para el desazolve de los ríos de Tabasco, las cuales adquirió de mediante adjudicaciones directas a dos empresas extranjeras, a las que pagó 738 millones de pesos. A pesar de esto, la dependencia sólo ha dragado el 35 por ciento de los afluentes del Grijalva.
Después de las inundaciones que sufrió el estado de Tabasco en el 2020, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo el compromiso de que Tabasco no se volvería a inundar. Entre las acciones a realizar para cumplir con este objetivo, destaca el dragado de los ríos que atraviesan la geografía tabasqueña por parte de la Semar.
Por tal motivo, la dependencia militar firmó dos contratos el 18 de diciembre de dicho año para la compra de 12 equipos marinos que limpiarían los afluentes del estado, asegurando así que las aguas provenientes de las presas del Grijalva llegarían al mar sin contratiempo alguno.
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El primer contrato lo signó con la empresa holandesa Damen Shipyards Gorinchem, a la que pagó 16 millones 723 mil euros, un equivalente a 409 millones 740 mil pesos mexicanos según el tipo de cambio en ese momento, por seis dragas marinas de corte y succión. El equipo sería entregado en el puerto de Veracruz, según lo estipulado en el contrato.
El segundo contrato fue con la empresa canadiense Normrock Industries Inc., misma que recibió 16 millones 13 mil dólares americanos, equivalentes a 328 millones 472 mil pesos por seis dragas marinas anfibias.
Ambos contratos firmados con estos proveedores en el extranjero se dieron mediante adjudicación directa, y la Semar otorgó hasta seis meses a las empresas foráneas para la entrega de las dragas compradas.
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Con estos equipos en mano, la dependencia pretende dragar 312 kilómetros de ríos en tres etapas. La primera etapa conformada por 41 kilómetros del río González, en la segunda etapa se planea dragar una longitud de 128 km de los ríos: Nacajuca, Pastal, San Cipriano, El Mango, Belén, Calzada y el dren Victoria, mientras que la tercera etapa abarca los ríos: Grijalva, El Espino y dren Victoria Fase II, en una longitud de 143 km.
Funcionarios de la Semar han mencionado que el plan de desazolve de los ríos del estado lleva un 35 por ciento de avance, y esperan terminar sus compromisos en el año 2024. Sin embargo, a pesar de haberse comprado 12 dragas marinas que requirieron una inversión de 738 millones 212 mil pesos, el vicealmirante José Barrada Cobos señalo que sólo tienen cuatro dragas trabajando, y están preparando dos más.
Mientras, las incógnitas se develan; la temporada de lluvias ha llegado y con ellos los arrastres de sedimentos provenientes del alto Grijalva, que se volverá acumular en las diferentes partes de los ríos del estado; las lluvias que han caído han obligado a encostalar la capital del estado ante las amenazas de las aguas que escurren proveniente del rio de la Sierra. La promesa presidencial de que la entidad no se volverá a inundar tardará en cumplirse. Un asunto que va más allá de comprar maquinaria en el extranjero.