El Dragón del Jazz, como se le decía a Tino Contreras, creó el jazz vulgar; no en un sentido peyorativo, sino entendido como el género más popular. El jazz no acartonado ni de academia, sino el que se fusiona con mariachi, con música tarahumara e incluso con el ballet, y así construyó un lenguaje musical que lo colocó en los escenarios internacionales más famosos como un pionero del jazz mexicano.
En ello coincidieron el antropólogo social Pablo Iván Argüello, y el compositor Héctor Infanzón, que compartieron una estrecha amistad con el músico quien falleció la madrugada del jueves a los 97 años de edad a causa de un infarto, según informó su esposa a través de redes sociales.
El músico trabajó hasta el final. Para celebrar su cumpleaños ofreció en abril pasado un concierto con su banda desde el museo Casa Azul de Frida Kahlo y su último disco La noche de los dioses fue editado por la disquera de Gilles Peterson Brownswood, en octubre de 2020.
Fortino Contreras González nació en Chihuahua el 3 de abril de 1924. Su gusto por la música le viene de familia, su abuelo Antonio fue integrante de la Sinfónica de Durango, dominaba el violín, piano y timbales. Su padre, Miguel, formó la orquesta de jazz Ok jazz band y su madre, Leandra, era intérprete de zarzuelas.
“Tino como uno de esos artistas seminales del jazz en México trajo todas esas influencias del norte del país y se convirtió en un pilar al integrar otras obras musicales, por ejemplo el jazz mariachi, la sinfonía tarahumara, y siempre tenía esa preocupación por pertenecer a la escuela del jazz de la década de los 50 a los 70 influenciado por otros géneros. Yo recuerdo el jazz ballet al que sumó bailarines, e integró otras expresiones artísticas a la música”, recordó Argüello, especialista en la obra de Tino Contreras.
El investigador destacó que la música del también pianista y trompetista rompió con los esquemas del jazz como género bohemio. Su música era tan alegre, dinámica y festiva como lo eran las primeras melodías de jazz nacidas en Nuevo Orleans, cuna del género. “Él sabía que esta música nació en las calles y mantuvo esa comunicación con el público siempre, su música no era acartonada”, apuntó.
Con 50 discos grabados, todos resguardados en la Fonoteca Nacional junto con más material de archivo, Contreras pronto se colocó en la escena global con giras por Francia, Alemania, España, Turquía, Grecia, Estados Unidos, Argentina, Brasil, Colombia y Venezuela; además es autor de dos métodos bilingües de enseñanza musical: How to play drums.
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“Fue un luchador incansable de este género con una discografía muy grande y siempre con esta intención de fusionar el jazz y la música mexicana. También fue un hombre con una gran sensibilidad y apertura a la comunicación con su público. Ojalá las generaciones jóvenes conozcan y aprecien el esfuerzo de este gran músico que fue pionero del jazz en México”, añadió Héctor Infanzón, compositor, pianista y productor mexicano.
Amigos y colegas expresaron su pesar por la muerte de Contreras, entre ellos el músico Antonio Sánchez: “Tino Contreras fue un innovador incansable. Él me introdujo al vocabulario de jazz cuando comencé a hacer la transición del rock &roll. Su muerte deja un hueco enorme en la historia musical de nuestro país”, escribió.
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