La Secretaría para el Desarrollo Económico y la Competitividad (SEDEC) activará en la entidad la plataforma “Semáforo” para vigilar que las más de 70 mil unidades de negocio que operan en la entidad transiten de manera correcta y gradual a la Nueva Normalidad.

La titular de la dependencia, Mayra Elena Jacobo Priego, señaló que será a partir de este martes 16 de junio cuando se active esta plataforma para que las empresas se registren y se vigile que transiten de manera correcta y gradual a la Nueva Normalidad.

Para ello, explicó que cada empresario capturará los datos de su negocio lo que incluye número de empleados, giro, espacio que ocupa el inmueble, entre otros.

Indicó que una vez registrados tendrán que instalar sus comités de sanidad e higiene y activar los protocolos diseñados para el sector al que pertenezcan.

La funcionaria dijo que tendrán que reenviar los mismos y subir sus evidencias fotográficas para que se verifique y valide que están cumpliendo con lo que se les ha pedido por parte de las autoridades.

Aclaró que se realizarán inspecciones aleatorias y aquellas empresas que incumplan y pongan en riesgo a su personal podrían ser sancionadas y hasta suspendidas.

Detallan acciones a emprender

En conferencia de prensa virtual, la titular de la dependencia desgloso algunas de las acciones que contempla el Decreto mismo que implica que se adopten medidas sanitarias para garantizar la protección de la población.

Cabe señalar que el objetivo de este Plan es establecer las acciones y medidas que deberán implementarse como parte de la estrategia estatal para la transición gradual, ordenada y segura hacia una Nueva Normalidad y la continuidad o reactivación de las actividades de los sectores público, social y privado, de conformidad con el semáforo de riesgo epidemiológico, en atención al valor social y al número de personas que participan en cada una de las actividades.

Algunas actividades se retomarán el 22 de junio (con semáforo naranja), cuando estarán regresando sus labores el comercio en general que incluye venta de electrodomésticos y línea blanca, mercerías y tiendas de telas, mueblerías, tiendas especializadas, joyerías, perfumerías, zapaterías, papelerías, librerías, tiendas de artículos escolares, distribuidoras de material para oficina y demás que cuenten con una superficie inferior a 500 metros cuadrados.

Asimismo, servicios varios como peluquerías, salones de belleza y barberías, bajo la restricción de operar preferentemente con cita, al 50 por ciento de su capacidad de atención al público durante el nivel de riesgo alto (semáforo naranja) y al 70 por ciento durante el nivel de riesgo medio (semáforo amarillo), siempre que se garantice la sana distancia.

A ello se suman giros como lavadoras de coches, lavanderías, tintorerías, foto estudios, centros de videograbación y empresas de servicios turísticos.

En tanto que para el 28 de junio de 2020 reiniciarán actividades centros religiosos como iglesias, templos, casas de oración, sinagogas, mezquitas y demás de similar naturaleza que podrán operar con aforo reducido al 50 por ciento, siempre que se garantice la sana distancia.

A partir del 1 de julio de 2020 se reabrirá el comercio en general es decir, plazas y centros comerciales, tiendas departamentales y demás que cuenten con una superficie superior a 500 metros cuadrados; también al 50 por ciento.

De igual forma, se abstendrán de realizar eventos que hagan proclive la aglomeración de personas, tales como venta nocturna, liquidación, gran barata y demás de similar naturaleza, los cuales se podrán realizar únicamente, en línea o vía telefónica bajo la modalidad de entrega a domicilio.

De este modo, de manera obligatoria establecerán las estrategias de control para contener la diseminación del virus SARS-CoV2 (COVID-19), las cuales contemplarán los rubros: promoción a la salud, protección a la salud, medidas de prevención de contagio y usos de equipo de protección personal.

Finalmente se informó que deberán cumplir con los criterios generales y protocolos adicionales que emitan la Secretaría de Salud y la Secretaría para el Desarrollo Económico y la Competitividad, siendo estas las autoridades estatales facultadas para vigilar y verificar que se cumplan las disposiciones contenidas en dichos instrumentos.

La funcionaria estatal añadió que cada sector de la economía tendrá que regirse por sus protocolos propios y adoptar las medidas de seguridad que se adapten a su entorno todo encaminado a una sana recuperación.