Tras señalar que es normal que en el primer año de la administración de Andrés Manuel López Obrador se registren crecimientos económicos bajos, el director general adjunto de Grupo Banorte, Gabriel Casillas reconoció que en el caso de Tabasco, la entidad acumula 17 trimestres de tasas negativas del Producto Interno Bruto (PIB).

Durante la Doceava Cumbre Mexicana de Finanzas e Infraestructura Sub - Nacionales organizada por LatinFinance, confirmó que durante los últimos tres trimestres, la entidad registró una caída de 11 por ciento en el Producto Interno Bruto.

Indicó que esto se debe a la dependencia que tiene la entidad con el sector petrolero, e incluso esta caída fue pronosticada desde hace 20 años por varios especialistas.

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Al participar en el panel de apertura con el tema Agenda Económica, Reforma de las Finanzas Públicas y Perspectivas, señaló también que Andrés Manuel López Obrador se convirtió en el primer presidente salido del sureste de México, por lo que se tienen buenas expectativas de inversión y desarrollo en esta parte del país.

Sin embargo, dijo que no debe extrañar a nadie la caída en los indicadores económicos a nivel nacional ya que cada vez que hay cambios de gobierno se han tenido crecimientos bajos.

Como ejemplo, comentó que en el primer año de ejercicio de Vicente Fox Quesada, el PIB cayó 0.4 por ciento, en tanto que en el primer año de Felipe Calderón Hinojosa “crecimos 2.3 por ciento, que hoy suena alto, pero es bajo porque veníamos creciendo por arriba del 3 por ciento durante varios años”.

Asimismo, señaló que con Enrique Peña Nieto se tuvo un crecimiento sólo de 1.4 por cuento cuando se venía creciendo un 4 por ciento; “Entonces siempre hay una desaceleración importante y hay dos fenómenos que ocurren, el primero es la caída de la inversión, porque cada que llega un presidente cambia a todos los que llevan a cabo este proceso y hay una curva de aprendizaje, de modo que se atrasa el gasto público, eso ha pasado en todos los sexenios, y segundo, la inversión privada, porque en época electoral, sin importar quién vaya a ganar pospone los grandes proyectos para después, estos son los dos fenómenos los vimos claramente este año”, expresó.

Gabriel Casillas consideró que las particularidades de este año son las huelgas de Tamaulipas de la industria maquiladora, y el combate al huachicol o l robo de combustible, que es bienvenido pero en algunos momentos dejó sin gasolina a varios sectores, pero también están los bloqueos de las vías férreas de Michoacán, lo cual resta cerca del 0.4 del PIB.

Sin embargo, dijo que este año se está viendo ya un cambio e inclusive a nivel de inversión internacional por lo que se tiene una mejor perspectiva para el 2020.

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El directivo de Banorte comentó además que en el caso de Tabasco se llevan 17 trimestres de tasa negativa del PIB, donde se ha llegado a una caída de menos 11 por ciento, pero “ya empiezan a ver un cambio de tenencia porque en el último trimestre según el último dato que tenemos el PIB ya creció 1.2 por ciento, si le quitamos el petróleo, que es un tercio del PIB en Tabasco y eso es uno delos grande s factores”, argumentó.

Además dijo que López Obrador es el primer presidente del sureste mexicano, “y como país hemos extraído recursos del sureste y no se le ha dado recursos para desarrollar a los estados”.

Finalmente dijo que por parte de la institución bancaria que representa hay toda la intención de estar presente en esta recuperación y otorgar oda las oportunidades posibles para que se desarrolle el sureste.