Al cierre de 2018, el último año de gobierno de Arturo Núñez Jiménez, Tabasco se hundió económicamente al registrar el mayor decrecimiento del país con 10.4 por ciento, lo que se tradujo en pobreza y desempleo.
Por cinco años, la entidad no registró números positivos en generación de fuentes de trabajo, pues las que se abrían no compensaban las que se perdían.
Sin embargo, durante el primer trimestre del año, la entidad al fin logró crear 997 empleos formales, es decir, dejó de perder y comenzó a ganar.
Aunque la meta para ese periodo era de 5 mil 500 según se desprende de la información proporcionada por la organización México ¿Cómo vamos?
Pero con la creación de esas fuentes de trabajo se logró romper la tendencia negativa que había arrastrado la administración nuñista, que sólo en los últimos tres meses del año pasado perdió 3 mil 244 empleos.
A pesar de este primer avance, el actual gobierno de Adán Augusto López Hernández cumplió menos del 30 por ciento de su meta, aunque el mandatario se mantiene optimista y confía en que el indicador comience a repuntar.
Si bien en abril, como ha pasado en el último sexenio, la entidad se ubicó en el primer lugar en desocupación laboral, de acuerdo al INEGI, López Hernández afirmó que el mes de mayo será muy positivo.
"Este mes ha habido un repunte, las empresas comienzan a trabajar y además tenemos el arranque de la refinería" detalló.
Aseveró que se está trabajando para sacar a la entidad de los primeros lugares de desocupación en el país.