A poco más de dos años y medio de haber iniciado en Tabasco un proyecto de inversión social, Shell México continúa apoyando el trabajo de productores ostrícolas en la Laguna de Mecoacán, en el municipio de Paraíso.
Para ello, en los próximos dos meses iniciará la tercera fase de este proyecto con la llegada de una tercera cooperativa de pescadores que está conformada por mujeres, con lo que además de darle un enfoque de género, se pretende consolidar la comercialización del producto. Manuel Morales Mercado, líder de Asuntos Sociales en Shell México, precisó que se trata de un proyecto de inversión social en la Laguna de Mecoacán, Paraíso.
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“Llevamos casi 3 años, vamos a empezar el tercer año trabajando con dos cooperativas ostrícolas y este año empezaremos con una cooperativa nueva”, afirmó en entrevista exclusiva para El Heraldo de Tabasco. Indicó que lo que se pretende es que la economía a nivel familia para los más de 200 productores que serán beneficiados, sea más sólida.
“Se trata de un proyecto de transferencia de tecnología y creación de capacidades, a través de la introducción de canastas flotantes como método más eficiente de producción de ostión. Estamos trabajando con dos cooperativas que tienen 50 miembros cada una, y vamos a involucrar a una tercera de mujeres que tiene 100 miembros aproximadamente, por lo que son unos 200 beneficiarios”, aseveró.
Reiteró que el programa empezó hace dos años y medio, y durante el primer año, la primera fase sirvió para probar el uso de la tecnología en la laguna. Mientras que el segundo año sirvió para hacer mejoras técnicas a la tecnología implementada.
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“Esta tercera fase, que estará iniciando en los próximos dos meses, se enfocará en mejorar y fortalecer las capacidades de negociación y comercialización de las cooperativas, para que justamente, una vez que ya se probó que en la parte técnica se produce más y mejor, se sepa cómo traducir ese aumento en la producción en un mejor ingreso para las familias, que sea vendiendo mejor, más y siendo más eficiente en el uso de recursos; en términos llanos, es vendiendo a mejor precio para que a las familias de los miembros de las cooperativas les pueda llegar más ingreso a sus bolsas”, enfatizó.
Morales Mercado comentó que actualmente la empresa tiene cinco proyectos de inversión social en todo el país, pero este de ostión es uno de los más importantes. “Todos los diseñamos a través de trabajo de campo, no en escritorio, nosotros vamos a campo a entender bien las necesidades, los intereses, preocupaciones y expectativas de las comunidades en las que operamos”, dijo.
Manifestó que actualmente, Tabasco es el segundo productor de ostión en México después de Veracruz, lo cual llevó a la empresa a diseñar este tipo de proyectos que son super relevantes para Tabasco. Agregó que Mecoacán es el segundo cuerpo lagunar más importante en producción de ostión, después de Sánchez Magallanes, Cárdenas
“Además, es parte del área de influencia directa de nuestras operaciones de exploración; entonces, por eso la importancia del proyecto”, estableció. Reconoció que en la laguna de Mecoacán hay preocupación por la contaminación de muchos años, pero en este proyecto el organismo del ostión es filtrador, ya que toma agua la limpia y la desecha.
“Entonces, el hecho de apostarle a mejorar e incrementar la población de ostión en la laguna a través de los diferentes métodos y cultivos que existen, la idea es que la población de ostión aumente, y con ello, por la naturaleza filtradora del organismo, mejoren las condiciones ambientales de la laguna; es por eso que además del beneficio social, este producto tiene beneficios ambientales importantes”, argumentó.
Detalló que es un proyecto que sigue en etapa piloto, de modo que está en una escala pequeña probando la tecnología, “pero la idea es compartir lecciones aprendidas y estas experiencias, para que esto eventualmente pueda ser replicado en otros lados como Campeche. La idea es que esto se replique y no sólo se quede en Tabasco”.
En cuanto a los resultados obtenidos en los dos años y medio de operación, dijo que el más importante que se ha visto es que el ostión se puede vender casi al doble o al triple del precio a que originalmente se vendía. Precisó que las dos cooperativas con las que han estado trabajando son Ormes y El Chivero, y la de Mujeres Transformando Mecoacán.
“Con esta nueva cooperativa, el impulso más importante que queremos dar ahí es un enfoque de género; es liderada por mujeres, pero más allá de eso, el enfoque es comercialización. Es que puedan vender mucho mejor eso que ya están produciendo; poder hacer sinergias con restaurantes; compartir entre las cooperativas prácticas de negociación, de manera que se puedan sentar a la mesa a negociar, y puedan conocer y defender bien el valor de su producto”, puntualizó.
Cabe señalar que para este proyecto Shell México trabaja en alianza con Espacios Naturales y Desarrollo Sustentable (ENDESU) y con el fondeo parcial de Chevron, y el objetivo es capacitar a personas en el uso de nuevas tecnologías para mejorar la producción de ostiones y proteger medio ambiente.
Esta nueva técnica de producción consiste en el despliegue de canastas en la superficie de un cuerpo de agua, lo que permite acelerar el proceso de crecimiento de los ostiones e incrementar su talla, al tiempo que mitiga el impacto ambiental que suponen las técnicas tradicionales de producción a través de pilotes que son enterrados en el fondo de la Laguna.
Las ostras cosechadas a través de este método se encuentran limpias y libres de organismos nocivos, de manera que se obtiene un producto de mayor calidad para su venta, lo que al final impulsa la economía local.
