Te diremos cómo dormir más fresco en la transición de verano a otoño

Si la humedad no te deja dormir, es porque quizá no estás realizando estas acciones, sigue leyendo

D. Osorio | El Heraldo de Tabasco

  · martes 6 de septiembre de 2022

Aunque estamos a punto de entrar en otoño, hay días en los que el calor sigue estando presente, aunado a la humedad de las lluvias, sobre todo en lugares cálidos húmedos donde no solo se batalla con las altas temperaturas, sino también con la humedad del ambiente, lo que trae mosquitos y otros insectos.

En caso de no contar con un aire acondicionado, hay otras estrategias que puedes aplicar para que tu ventilador no se dañe de tanto uso y puedas dormir muchísimo más fresco y empezar de nueva cuenta tu rutina diaria.

¿Qué pasa cuando mal duermo por el calor?

Al subir las temperaturas hay muchas cosas que debes tomar en cuenta, muchas personas sufren golpes de calor, deshidratación, migraña crónica e incluso alteraciones del sueño, lo cual puede mermar el bienestar de cualquier persona.

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Esto se debe a que cuando intentamos dormir el cerebro se mantiene más preocupado en refrescarse, lo que provoca que estemos en la cama dando mil vueltas, inquietos buscando una posición cómoda, e incluso sintiendo más calor con el aire caliente del ventilador.

Al subir las temperaturas hay muchas cosas que debes tomar en cuenta, muchas personas sufren golpes de calor, deshidratación, migraña crónica e incluso alteraciones del sueño, lo cual puede mermar el bienestar de cualquier persona. Foto: Cortesía | Pixabay

Date una ducha

Para poder dormir como bebé lo que puedes hacer es antes de acostarte tomar una ducha, si tienes la suficiente privacidad es aconsejable bañarse con la puerta abierta o la ventana en todo caso, esto para que el vapor del baño no te acalore al momento de terminar.

El agua te ayuda a relajar el cuerpo, además de regular tu temperatura. Sin embargo, pese a lo que podría creerse se aconseja que el agua esté a temperatura ambiente, no fría, ya que esto provoca que el cuerpo necesite recuperar la temperatura normal, lo que activa la circulación y por ende, da la sensación de más calor.

Cambia tu juego de cama

Existen ciertos materiales que retienen el calor más que otros, por ejemplo, se recomienda usar sábanas de lino o algodón los cuales están elaborados a base de fibras naturales los cuales resultan ser mucho más refrescantes.

De igual forma estas fibras son útiles ya que permiten que el aire circule de una mejor manera y por ende, haya una transpiración efectiva, al usarlas se logra una mejor temperatura del cuerpo.

Esto se debe a que cuando intentamos dormir el cerebro se mantiene más preocupado en refrescarse, lo que provoca que estemos en la cama dando mil vueltas, inquietos buscando una posición cómoda, e incluso sintiendo más calor con el aire caliente del ventilador. Foto: Cortesía | Pixabay

Un consejo que puedes aplicar es que unas cuantas horas antes de que te vayas a dormir metas las sábanas en una bolsa de plástico que quede bien cerrada y las metas por un rato en el congelador.

Aleja de ti los dispositivos electrónicos

Al momento de dormir no tengas cerca de ti dispositivos cargándose como el celular o la laptop, ya que estos emanan mucho calor, por lo que al tenerlos cerca de ti provocará que la temperatura en tu entorno aumente.

Duerme sin ropa

Hacerlo es bastante satisfactorio, aunque existen pijamas bastante frescas, el dormir con ropa dependiendo la tela y el diseño puede incluso ser incómodo, sin embargo, si no estás acostumbrado a hacerlo puedes empezar a dormir en ropa interior.