Tabasqueños “se la curan” con un caldo en el Pino Suárez

Trasnochados y fiesteros que celebraron la Noche Mexicana encuentran en restaurantes, fondas y puestos ambulantes un alivio para la resaca o cruda

José Pérez | El Heraldo de Tabasco

  · jueves 16 de septiembre de 2021

Foto: Javier Chávez | El Heraldo de Tabasco

Luego de una larga noche de festejos por el Grito de Independencia, cientos de tabasqueños amanecieron indispuestos.

Por ello, trasnochados y fiesteros encuentran en restaurantes, fondas e incluso puestos ambulantes instalados en las banquetas, un alivio para la resaca o cruda.

Con caldos de pavo, gallina, robalo y hasta camarón que son los de mayor demanda, los desvelados tratan de poner un remedio a las molestias naturales ocasionadas por la ingesta inmoderada de bebidas alcohólicas.

Aunque para muchos, la mejor forma de poner fin a este malestar, es la ingesta de abundantes líquidos para rehidratarse, una cerveza fría y tomar medicamentos para el dolor de cabeza, y sobre todo un buen descanso, algunos optan por los remedios tradicionales como el tomar caldos calientes y bien picosos.

De ahí la costumbre de ir a los caldos un día después de la borrachera, que en este caso correspondió al 16 de Septiembre, y si de caldos se tratan hay unos locales que para ello se pintan solos.

Foto: Javier Chávez | El Heraldo de Tabasco

Desde la tradicional pancita, hasta los consomés de res o de borrego, pasando por el mondongo, puchero, sancochado de pavo o de gallina, hasta volver a degustar un delicioso pozole.

Sin dejar atrás los cocteles de camarón y otros como el Vuelve a la vida que constituyen una opción para los que prefieren los mariscos.

No hay que olvidar que el consumo de alcohol favorece la producción de orina que conlleva a la pérdida de líquidos y electrolitos, por lo que los caldos de esta forma ayudan a reponer la pérdida de sodio, al tiempo que hidratan al cuerpo.

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Ante esta situación, en algunos locales situados en el centro de Villahermosa fue común encontrar a decenas de personas pidiendo su caldo para recuperar energías.

Lo mismo ocurrió en mercados públicos como el José María Pino Suárez, en donde hay varias fondas y locales especializados en comidas y caldos picosos que este 16 de septiembre se vendieron en gran medida.