El secretario de Salud en el estado, Alejandro Antonio Calderón Alpi, señaló que al día no se tienen reportes en Tabasco de casos de virus respiratorio Sincitial o VRS.

Sin embargo, dijo que por tratarse de una enfermedad que prolifera los meses de invierno, se hace un llamado a la población para extremar precauciones.

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“Al día de hoy no nos han reportado, pero son virus respiratorio que se den más en esta temporalidad, en octubre, noviembre, es la época invernal que es donde se pega más, entonces son virus que se esperan en la temporada, pero hoy no hay ningún número de casos fuera de lo normal”, afirmó.

El funcionario estatal hizo énfasis en que las personas acudan a vacunarse contra enfermedades respiratorias.

Por eso la importancia de que se vacunen contra la influenza, contra el Covid, contra el neumococoAlejandro Antonio Calderón Alpi

Recordó que la dependencia tendrá más de 500 mil dosis de vacuna contra estos padecimientos en la temporada invernal.

“Es importante que la población vaya y se vacunen, porque sabemos que esas enfermedades son temporales, vienen por la temporada de invierno”, destacó.

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Asimismo, dijo que las recomendaciones son los cuidados de prevención, no al hacinamiento, sobre todo que vayan y se vacunen, no estar todos en la misma habitación, ventilar las áreas, es importante y sobre todo el lavado de manos.

Qué es el VSR o virus Sincitial

El virus respiratorio sincitial (VRS) es un organismo viral que puede provocar infecciones en las vías respiratorias altas y bajas.

Cabe señalar que el VSR es altamente contagioso, y se puede transmitir por el contacto estrecho entre las niñas y niños que asisten a las guarderías o escuelas.

Cuando una persona infectada tose o estornuda y las gotitas con virus entran a los ojos, nariz o boca.

Al tocar superficies en las que ha caído el virus al toser, estornudar o hablar (por ejemplo: manijas de las puertas, mesas, juguetes, utensilios de comida) y tocarse la cara sin lavarse las manos.

Las personas con mayor riesgo de enfermarse

gravemente son:

• Bebés prematuros.
• Niñas y niños menores de un año.
• Niñas y niños pequeños con defectos cardíacos congénitos (desde el nacimiento) y
• enfermedad crónica de los pulmones.
• Niñas y niños pequeños que tienen el sistema inmunitario deprimido (debilitado) debido a una enfermedad o un tratamiento médico.
• Adultos con el sistema inmunitario deprimido.

Adultos mayores, especialmente aquellos con enfermedad cardiaca y pulmonar subyacente.

Los síntomas son:

• Escurrimiento nasal.
• Estornudos.
• Tos.
• Fiebre.
• Apetito reducido.
• Irritabilidad o menor actividad.
• Silbido en el pecho.
• Dificultad para respirar.