A casi tres décadas de su aparición en el mercado, los llamados “productos milagro” siguen teniendo presencia en cierto segmento de la población, que ocasiona que siga proliferando la venta de estos artículos en locales tanto establecidos, como en el comercio informal, esto a pesar de las constantes revisiones y operativos que realizan las autoridades en materia de salud, y que en varias ocasiones ha culminado con el decomiso de cajas de productos no autorizados y que son considerados dañinos para el ser humano.
Aunque la principal causa del consumo de estos productos “milagrosos” siga siendo el sobre peso y la obesidad, también hay quienes lo buscan para otro tipo de dolencias que van desde problemas de la circulación, enfermedades como la diabetes o incluso para situaciones relacionadas con el funcionamiento sexual.
Sin embargo, a como estos productos pueden representar alguna ventaja para el consumidor, como el cambio de hábitos alimenticios o la compra de productos naturistas que son económicos y no les significa una afectación, también pueden representar una desventaja sobre todo si no se complementa con una dieta balanceada y la práctica de ejercicio, en el caso de las personas que padecen sobrepeso.
Mientras tanto en algunas plazas comerciales y mercados públicos, continúa la venta de productos de este tipo que hicieron su aparición a partir de los años 90’ y que continúan con los lemas de prometer a la gente bajar de peso en muy pocas semanas o bien lograr bajar de tallas de cintura, o incrementar los músculos.
Esto ha dado pie a que muchos de los que se dedican a venderlos, no sólo contacten con proveedores sino que algunos elaboran sus propios productos en base a fórmulas demostradas a base de alimentos naturales e ingesta de tés.
Como ejemplo, en el centro de la ciudad incluso en el mercado público José María Pino Suárez, en su sede provisional, hay varios locales dedicados a la venta de este tipo de mercancía, agregándoles además lociones o ungüentos para cualquier tipo de padecimiento.
Sin embargo, lo más recomendable en estos casos es acudir con especialistas que deben orientar a las personas sobre los riesgos y factores que hay que tener en consideración antes de decidor comprar una de estas fórmulas y esperar que milagrosamente los males desaparezcan.