Los virus, incluyendo el SARS-CoV-2 que provoca el Covid-19, son altamente contagiosos. Viajan a través de las gotitas de saliva que se expulsan al hablar, toser o estornudar, en una distancia de hasta metro y medio.
Es por eso que, dentro de las estrategias para prevenir la propagación del también llamado coronavirus, surge el llamado estornudo de etiqueta que además, impide que las manos se contaminen con saliva o mucosidad.
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Con esto se evita contagiar a otras personas que se encuentren cercanas a la persona infectada, ya que se limita la liberación de gotitas de saliva al medio ambiente.
En tiempos de pandemia, hay dos formas correctas de estornudar o toser: tapando la nariz y boca con un pañuelo desechable, el cual deberá ser arrojado a la basura inmediatamente después de ser utilizado; o cubriendo ambos con el ángulo interno del brazo, a fin de evitar que las gotas de saliva se propaguen.
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Al terminar, es indispensable realizar un adecuado lavado de las manos con agua y jabón durante 20 segundos, con la técnica ya conocida para eliminar por completo el virus que causa el Covid-19.
Combinar el uso del cubrebocas con el estornudo de etiqueta es esencial para evitar contagios de coronavirus, ya que así se impide que las gotas de saliva traspasen la herramienta de protección.
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La pandemia continúa, por lo que las autoridades sanitarias hacen hincapié en lo esencial de acatar todas las medidas de prevención ya conocidas desde el año pasado, cuando apareció el SARS-CoV-2, aún cuando ya se ha vacunado a gran parte de la población.