La salud es un tema delicado que no puede ni debe tomarse a juego, sobre todo porque existen enfermedades que pueden generar serias complicaciones en nuestro bienestar o peor aún, ocasionarnos la muerte.
Los problemas del corazón son uno de ellos, por lo que es necesario que cualquier persona que los tenga acuda a chequeos constantes con el médico y se mantenga bajo supervisión permanente, pues se corre el riesgo de sufrir un paro cardíaco.
¿Qué es un paro cardíaco y porqué es tan importante evitarlo?
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Un paro cardiaco es un problema “eléctrico” el cuál no debe confundirse con un ataque cardiaco, ya que este último está relacionado a un problema de circulación, sobre todo cuando el flujo de la sangre se dirige a una parte del corazón que está obstruida, es decir, una arteria bloqueada.
Mientras que en el caso del paro cardiaco este se da referente a los circuitos del corazón ya que según la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) los ritmos de los latidos del corazón se alteran y este debe bombear de forma deficiente o peor aún, no bombear en lo absoluto.
Lo que pasa es que una persona puede comenzar a jadear para intentar respirar, lo cual puede provocar su colpaso y muerte en caso de que no se trate a tiempo, y aunque este problema suele ser repentino y sin previo aviso, según J. Brent Muhlestein, MD, codirector de investigación cardiovascular en el Instituto del Corazón del Centro Médico Intermountain en Salt Lake City, Utah pueden existir algunas señales que nos ayuden a evitar una muerte.
Alerta a los dolores de pecho
Esta es quizá la alerta a la que debas tener más cuidado, aunque es más notoria en caso de un ataque cardíaco, también puede ser señal de un problema mayor, por eso es necesario estar pendientes en caso de que el dolor sea tan fuerte al sentir una opresión en el pecho.
Esto debido a que el dolor en el pecho se da debido a que no existe suficiente oxígeno circulando en la sangre, lo que llega hasta el músculo cardíaco, este puede durar unos minutos o puede calmarse y regresar horas más tarde o incluso al día siguiente.
Dificultad para respirar
Otro signo que puede ser importante tomar en cuenta es la dificultad para respirar, sobre todo en caso de que normalmente puedas realizar actividades físicas como subir escaleras, correr o bailar y de repente sientes que te falta el aire en poco tiempo.
Esto ya que las personas que experimentan este tipo de síntomas pueden tener un mayor riesgo de morir por una enfermedad cardíaca a comparación de aquellos que no tienen síntomas.
Cuidado con la sudoración excesiva
Debes prestar atención a sudar más de lo habitual, porque aunque es normal hacerlo en una actividad forzada, no es normal hacerlo si se está en reposo por ejemplo. Esto se debe a que es más difícil para el corazón bombear sangre a través de las arterias que se encuentran obstruidas, por lo que el cuerpo responde mediante la sudoración.
Toma en cuenta que durante la menopausia muchas mujeres sufren este síntoma, lo cual puede considerarse normal, sin embargo, en caso de que esto sea muy recurrente, lo mejor es acudir a un médico para comunicarle los cambios.
