Exorcismos, apariciones, objetos incandescentes, almas penando y hasta troles son algunos de los casos paranormales que han ocurrido en Tabasco, o por lo menos así lo creen quienes los han vivido. A continuación, presentamos cinco casos.
El concepto de paranormal, la Real Academia Española lo define como, lo que se dice de un fenómeno que no puede ser explicado por los conocimientos científicos actuales, y es objeto de estudio de la parapsicología.
De acuerdo a lo anterior es un suceso inexplicable o por lo menos para quien lo experimenta, como los expuestos en la página de esta casa editorial en la sección Asústame, los cuales solo quedan en el relato oral de quien lo cuenta.
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Exorcismo en Villahermosa
Para sacar al maligno de su casa, el cual llegó en forma de maldición, una mujer tuvo que recurrir a una psíquica, quien realizó una sesión espiritista, hecho que ocurrió en un finca en Villahermosa y que fue grabado. Las influencias negativas habían atormentado a su familia desde hace años, causando la muerte de su madre, que su padre haya enfermado y provocado constantes pleitos entre sus parientes, se consigna en el texto.
Teresa mencionó que en la vivienda escuchaba constantemente ruidos extraños, voces y llantos: “Desde que nosotros nos cambiamos a la casa de nuestros papás, empezaron a escucharse ruidos, llantos de bebés, voces, pasos, como si fuera un hospital”.
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Los acontecimientos paranormales hicieron que la entrevistada temiera por su vida y la de su familia; incluso provocaron la muerte de su madre y la enfermedad de su padre -o por lo menos así lo creía la mujer. Además, atraía malos entendidos entre quienes se encontraban en el hogar.
La sombra
Cuenta un hombre que una sombra se le apareció cuando era niño en su casa; sus ojos rojos como la sangre aún los recuerda. La vivienda donde ocurrieron los inexplicables acontecimientos, se encontraba en el Pueblo Mágico de Tapijulapa, Tacotalpa; en el tiempo de los presuntos hechos paranormales, el lugar aún no era designado como sitio turístico. Sin embargo, la comunidad ya contaba con cierto encanto.
Según el relato del entonces menor de edad, en la ventana de su casa comenzó a formarse una nube que se convirtió en una silueta negra de hombre con sombrero. Pese al miedo, el muchacho se acercó a la sombra y metió la mano entre ella, después lo único que recuerda es que estaba llorando en la puerta de la casa de su vecina.
Bola de fuego en Jalpa de Méndez
Una bola de fuego se veía por las noches deambular por la colonia La Pera de Jalpa de Méndez, y cuando aparecía los perros comenzaban a aullar y los caballos a reparar por el temor que sentían, pues era algo maligno. Las personas que se quedaban observando a la luminosidad quedaban ciegas, porque se les quemaban las pupilas; sin lugar a dudas, esos días fueron de miedo y terror en la localidad.
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El citado poblado aún tenía pocos habitantes y no contaba con electricidad en el tiempo en que apareció este objeto incandescente. Las calles eran apenas pedazos de tierra delimitados por las casas, lo que hacía muy difícil caminar por ellas y más cuando llovía, ya que se convertían en lodazales, donde si no te manchabas el calzado o los pies era cuestión de suerte.
Aparte del miedo que provocaba entre los seres vivos, humanos y animales, asombraba ver las ramas de los árboles agarrar fuego con la sola presencia del objeto sin necesidad de tener contactos con él; quienes presenciaron este fenómeno se convencieron de que el mal en una de sus tantas formas deambulaba por la zona.
Ingenio Dos Patrias, un lugar donde penan almas
Un lugar donde se aparecen almas penando, seres bestiales y el propio diablo, es el Ingenio Dos Patrias, en Tacotalpa. Los habitantes del municipio conocen el lugar y las historias que se cuentan. Muchas de ellas están en el límite de los normal y lo fantástico. Las ruinas de edificios invadidas por la maleza son el recuerdo de un complejo que fue parte importante del desarrollo de la demarcación; y que por cinco décadas dio trabajo a los tacotalpenses y avecindados en este rincón de Tabasco.
Todo inició con dos personas de diferentes nacionalidades, una mexicana y la otra cubana, sin embargo, es Federico Jiménez Paoli, oriundo de estas tierras, que le dio forma al proyecto. En 1948 inicia, indica el cronista César García Córdoba, y agrega que en el lugar ocurren cosas extrañas.
“Desde aquellos tiempos comenzó a operar y fue la empresa que hizo de Tacotalpa todo un desarrollo económico, fue la empresa más importante por más de 50 años. En todo lo que son las ruinas se pueden escuchar ruidos extraños, también se pueden ver algún tipo de visiones. “Esto no es nada del otro mundo, a lo largo de la humanidad ha habido testimonios en diversos tiempos de que existen muchas cosas que superan el conocimiento humano”.
Por su parte, un ciudadano mencionó que en el sitio suceden hechos inexplicables: “Aquí lo que más he escuchado que si tu vas en la noche al Ingenio Dos Patrias se aparece el diablo, que sale en caballo en toda esa zona. Fue una hacienda, que nos dio auge aquí en Tacotalpa, nada más que fracasó”.
¿Troles en Tabasco?
Una familia vivió momentos aterradores cuando se topó con unos troles en Tabasco, seres que no son de estas tierras. El matrimonio llegó a tierras tabasqueñas por cuestiones de trabajo, el esposo laboraba para una empresa que se dedicaba al mantenimiento de maquinaria pesada, ya que en breve se iniciaría la construcción de un gran proyecto que requeriría personal capacitado para darle mantenimiento a ciertos aparatos, y el hombre se encargaría de enseñarles todas estas cuestiones.
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La casa donde se hospedaron estaba cerca de una zona de pantanos y era de poca población, pero una carretera les permitía no perder contacto con los poblados de los alrededores. En una ocasión, la mujer encontró en la mesa de la cocina unas figuras deformes, al verlas se sintió incomoda, como si la observaran. El marido al darse cuenta que su esposa las miraba, se apresuró a explicarle que un compañero se las había regalado, según para alejar la mala suerte, su nombre eran troles y le había explicado que en su país, Noruega, muchos los cargaban en sus ropas o los tenían en alguna parte de sus casas.
Pese a la explicación, a la mujer no le dejaron de parecer formas grotescas, pero al hijo no, que al verlos los tomó como parte de sus juguetes. El pequeño desde el principio comenzó a tener un apegó a las figurillas, pero la situación subió de tono cuando las figuras comenzaron a deambular por la casa y la señora intentó ahuyentarlos, por su parte el marido se convenció de que la mujer le contaba cuando vio cerca de un pantano que los trol había hecho una casa en ese lugar. Tras lo acontecido la familia se trasladó a Villahermosa
