El pasado fin de semana falleció a los 94 años Amou Haji, quien era conocido como el ‘hombre más sucio del mundo’, ya que pasó gran parte de su vida sin tomar un baño, además, prefirió alejarse de la sociedad para exiliarse en una choza en donde vivió solo por mucho tiempo. Su caso llamó la atención de los medios de comunicación y la comunidad científica.
De acuerdo con la agencia de noticias IRNA, él murió la tarde del domingo 23 de octubre, en un pueblo llamado Dejgah, que está ubicado en la provincia de Fars, al sur de Irán. Su estilo de vida, captó la atención de cientos de transeúntes, por lo que años atrás decidieron hacer pública su historia, que no tardó en volverse popular a nivel global.
Los residentes de la zona, lo auxiliaron para construir un pequeño espacio para que pudiera habitar, sin embargo, la mayoría de ellos estaban preocupados, ya que era un adulto de la tercera edad que no estaba en las mejores condiciones, además, no había casas alrededor de él, y consideraban que eso lo exponía.
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¿Quién era el hombre más sucio del mundo?
Amou Haji era un hombre iraní que, en los últimos 67 años evitó tener contacto con el agua, en una entrevista confesó que tomó esa elección porque le daba miedo contraer alguna enfermedad. Él solía vivir como una persona en situación de calle y se las ingenió para encontrar una vestimenta improvisada y comida en diferentes lugares.
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En el 2014 un periódico de la región hizo un artículo sobre él que se tituló ‘el ser más sucio del mundo’, esto le dio una gran fama en distintas partes del planeta. También, otra compañía de entretenimiento filmó un documental para plasmar “su extraña vida”.
Se reveló que él ha estado en las calles desde que era un niño; en un punto tuvo una crisis emocional, pues relató que sentía que algo provocaba que no pudiera sentirse tranquilo; luego de analizarlo, indicó que la solución era evitar las duchas, así como apartarse de los grandes grupos sociales.
Años atrás, él solía refugiarse en espacios improvisados, por ejemplo, para protegerse del Sol se escondía en agujeros, igual acomodaba ladrillos para levantar pequeñas fortalezas, aunque no tenía ningún tipo de seguridad.
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Al ver esta situación, los pobladores de la región se organizaron para construir un cuarto mejor condicionado, a pesar de que seguía estando en un espacio reducido y con carencias, estaba fortalecido con cemento. Aquí fue donde estuvo el resto de sus días.
¿Tenía alguna enfermedad Amou Haji?
Después de que se volviera famoso, los especialistas de la Escuela de Salud Pública de Teherán, de la Universidad de Ciencias Médicas, con sede en la capital de Irán, acudieron a su hogar para realizarle exámenes médicos.
Le hicieron diferentes pruebas, entre ellas una de hepatitis, parasitología, y varias para determinar si tenía alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS). Para sorpresa de los especialistas, los resultados fueron negativos, esto quiere decir que su elección de alejarse del baño no le trajo consecuencias.
Lo único que hallaron fue una infección llamada Triquinosis, que suele producirse por ingerir carne en mal estado, sin embargo, Amou no parecía tener síntomas o malestares relacionados. En conclusión, lo expertos comentaron que, al no ducharse, generó un sistema inmunológico más fuerte que el de otros seres humanos.
Publicado originalmente en El Sol de Puebla
