#Mascotas | Tu perro nunca ladra o deja de hacerlo, ¿por qué?

Esta es la inquietud que algunas personas han llegado a manifestar al percibir que su mejor amigo peludo pocas veces emite algún ladrido o que tiene dificultades para hacerlo.Se sobreentiende que los ladridos de los perros son como la voz para los seres humanos; es decir, que a través de esos sonidos muy característicos pueden comunicarse entre ellos y, por qué no, hasta con sus familia humana.

A través de los ladridos los canes manifiestan aburrimiento, la presencia de algún extraño, algún sentimiento y, además, es una forma de llamar la atención, tanto que si lo hace con mucha frecuencia a algunas personas les puede llegar a parecer hasta molesto.

Algunos poseen una personalidad muy tranquila, y ladrar no es lo suyo.

ASUNTOS MÉDICOS

Muchos optan por acudir al veterinario para descifrar las causas y hacen muy bien en ello, pues a veces se da el caso de que el perro trata de ladrar pero sencillamente no puede hacerlo. En este último caso, acudir al médico es vital para determinar el por qué. Entre las causas más comunes están los vómitos constantes, problemas que afectan significativamente el sistema respiratorio o alguna lesión en la tráquea o laringe. Solo el experto determinará cuáles pueden ser las razones.

PERROS TRANQUILOS

Hay razas de perros que son demasiado tranquilas como para ladrar como respuesta a cualquier estímulo. Hay otras, por ejemplo, que poco se comunican a través de estos sonidos, sino que lo hacen con especies de aullidos y lloriqueos. Más adelante nombraremos alguna raza de perro que se destacan por su escaso ladrido.

Los especialistas te dirán cuál es el origen del problema.

PERSONALIDAD

Existen expertos que han llegado a manifestar que, al igual que una persona, los perros tienen personalidades diferentes y los hay algunos más tranquilos que otros, por lo que simplemente no les gusta o no les hace falta ladrar tanto como otros de su misma especie.

LUNA DE MIEL

Puede pasar con mucha frecuencia cuando adoptas a un cachorro. Mientras dure el proceso de adaptación se estará muy quieto; esta etapa es considerada como el efecto Luna de Miel.

¿Tu perro no ladra? Ya te mostramos algunas razones, pero recuerda consultar siempre con un profesional.