#Mascotas | ¿Cómo detectar y tratar un golpe de calor en perros?

Las altas temperaturas pueden causar problemas a humanos y mascotas por igual, ¡cuidado!

Casimiro Sánchez | El Heraldo de Tabasco

  · miércoles 11 de mayo de 2022

Las altas temperaturas representan un peligro para tu perro. Fotos: Cortesía

Un golpe de calor en el caso de los perros, al no tener glándulas sudoríparas repartidas por el cuerpo, únicamente pueden regular su temperatura corporal mediante los jadeos, y eliminar el sudor a través de las almohadillas de sus patas, proceso que de por sí es lento.

Esto provoca que, si su temperatura corporal aumenta considerablemente, pueda presentar un golpe de calor, que puede ser peligroso.

Tu perro puede llegar a perder la conciencia y sufrir daños mayores tales como hemorragias.

GOLPE DE CALOR EN TU PERRO

La aceleración del ritmo cardiaco del perro, acompañada de jadeos con presencia de babas, y de una respiración rápida y nerviosa, son algunos de los síntomas de un golpe de calor en perros más evidentes.

SÍNTOMAS

  • Un golpe de calor en tu perro puede aumentar su temperatura corporal a más de 42°C, teniendo en cuenta que el nivel medio óptimo en perros es de 38 a 39°C.
  • Se produce una disminución de azúcar y sales en su cuerpo, que se puede manifestar mediante la presencia de temblores, debilidad muscular y falta de equilibrio. En algunos casos, también puede tener vómitos y diarrea.
  • Sus mucosas y encías pueden adquirir un color azulado debido a la falta de oxigenación en sangre.
  • El perro puede llegar a perder la conciencia, y sufrir daños mayores tales como hemorragias, insuficiencia renal o hepática, daño cerebral, e incluso fallo en varios órganos.

Jadeos con presencia de babas y una respiración rápida y nerviosa son causa de alerta.

QUÉ HACER

Es importante mantener la calma y actuar de forma rápida y eficiente. Mientras llegas a la clínica veterinaria, dale los siguientes primeros auxilios:

  • El primer objetivo es disminuir su temperatura corporal, para ello mójalo continuamente con agua (ni fría, ni caliente). No lo cubras con toallas, ni lo bañes con agua helada o le pongas hielos, a menos que lo indique el veterinario.
  • Procura que beba agua fresca sin acelerarse. Ni mucha, ni muy rápido, para que se vayan estabilizando sus niveles de hidratación.

Un golpe de calor en tu perro puede aumentar su temperatura corporal a más de 42°C.

Al llegar a la clínica veterinaria, describe con detalle el episodio que ha sufrido tu perro. Seguramente, el veterinario lo revisará cuidadosamente y controlará sus signos para mantenerlo fuera de peligro. También es factible que le dé algún tratamiento para acelerar que se recupere.