Hay lugares que parecen seguros, como por ejemplo restaurantes o cafeterías, pues en su mayoría son lugares cerrados y con seguridad, además de atención personalizada de parte del personal.

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Esta falsa seguridad hace que muchas veces las personas se confíen creyendo que no pueden ser víctimas de la delincuencia, sin embargo, esto no siempre es así.

Existen otras modalidades menos violentas y más discretas, que los rateros utilizan para robar tu dinero o tarjetas de crédito sin que te des cuenta. Aquí te decimos qué hacer al respecto.

Una de las formas más comunes en los que la delincuencia opera consiste en ofrecer productos cuando el cliente llega a la mesa y colocan la bandeja justo arriba de las pertenencias de la persona, para que al momento en el que se inicie la plática, la persona se distraiga y aprovechen a robarle lo que esté sobre la mesa, ya sea su cartera o su celular.

Otra forma en la que pueden operar este tipo de delincuentes es distraer al comensal mientras una segunda persona aprovecha a llevarse las pertenencias de las personas que se encuentran en la mesa. Sobre todo cuando son bolsas o mochilas que se cuelgan en la silla.

Este tipo de maniobras suelen emplearse en las mesas de afuera de las cafeterías o restaurantes, donde presuntos vendedores ambulantes llegan a ofrecer sus productos.

En todo caso lo que podrías hacer es no dejar objetos de valor sobre la mesa y vigilar muy bien tus pertenencias. En caso de llevar un bolso mantener los cierres cerrados y colocar la bolsa o mochila en un lugar visible o en un perchero.