Según Cerveceros de México, para producir un litro de cerveza se necesitan 2.6 litros de agua, sin embargo, a nivel mundial puede llegar a utilizarse de 4 a 6 litros más por cada litro.
Lee más: NASA revelará la fotografía más profunda del universo tomada por un telescopio
El promedio en México es de 2.6, y es una cifra que sólo Heineken a alcanzado ya que es una meta que deben alcanzar Cerveceras de México; cabe decir que anteriormente se utilizaban 3.6 litros de agua para un litro de cerveza.
Aun así, el consorcio tiene fijado reducir el uso de agua a dos litros, esto aplicando agricultura sustentable la cual busca reducir el consumo de agua en los campos y busca mejorar la productividad con mejores técnicas.
Otra industria que no se queda atrás son las refresqueras, un estudio de la UNAM señala que Coca-Cola necesita al menos 34.5 litros de agua para producir medio litro de refresco.
“A esto hay que añadir que existe una falta de proporción entre el pago por derechos de explotación y las utilidades de la empresa”.
“Esto es un indicio de que el sector público privilegia los intereses del sector privado por encima del derecho fundamental de la población de acceder al agua, cuando el pago adecuado las concesiones de explotación de los acuíferos podría servir para financiar la cobertura de agua potable a poblaciones que no tienen aún acceso a ella”, señala el estudio.
Esta situación se puede ver bien en el privilegio por parte de Samuel Ramos frente a los empresarios, al señalar que “no hay agua para consumo humano, pero sí para las empresas”.
La segunda empresa que más consume agua en México es PepsiCo que tiene permitido extraer 32 mil millones de litros de agua al año para sus refrescos y botanas.
“Esto ocasiona graves daños al medio ambiente, y aunque las empresas gastan mucho dinero en publicidad y en crear fundaciones para presentarse como empresas ecológicas, sus acciones son contradictorias, pues por ejemplo bloquean las acciones gubernamentales para evitar tomar su responsabilidad en la contaminación que provocan los empaques de sus productos”, concluye el estudio.
Publicado originalmente en El Sol de México