El agua turbia es un problema con el que tienen que lidiar los hogares tabasqueños, ocasionando atraso en las labores cotidianas como lavar la ropa o incluso las personas tengan que bañarse con cubetas, esperando que la arena o la tierra se asiente en el fondo del recipiente. Ante tal situación te damos a conocer unas soluciones si se presenta tal situación.
La importancia de consumir un líquido limpio es que con ello se evitan enfermedades como la disentería, tifoidea y el cólera. Es así, que la problemática aquí mencionada puede trastornar la vida cotidiana de las personas tanto en sus actividades diarias como en la salud. Siendo la solución general la filtración, la cual tiene diversos métodos, que a continuación damos a conocer.
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La filtración por tela
Un pedazo de tela puede ayuda a eliminar impurezas sólidas del agua, así como de larvas de insectos. Expertos recomiendan usar las telas de algodón, que debe ser lo suficientemente gruesa para lograr su propósito, limpiar de agente extraños. Dentro de las ventajas que ofrece este tipo de filtración está la sencillez de su aplicación, costo casi nulo y muy útil para un tratamiento previo del líquido. Sin embargo, es inútil este tipo de limpieza si el agua viene contaminada de origen.
Tratamiento por ebullición
La aplicación del tratamiento por ebullición es también relativamente sencilla. Permite matar todos los gérmenes y microorganismos presentes en el agua. Para ello, esta debe filtrarse o decantarse previamente y después hervirse en grandes cantidades (no basta con que rompa a hervir) durante un minuto en altitudes bajas y durante tres minutos a más de 2.000 metros. El agua tratada por ebullición puede tener un sabor soso. Este problema puede solucionarse agitándola enérgicamente para reoxigenarla o añadiéndole un poco de sal.
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Tratamiento por cloración
La cloración es un medio sencillo y eficaz para desinfectar el agua y hacerla potable. Consiste en introducir productos clorados (pastillas de cloro, lejía, etc.) en el agua para matar los microorganismos en ella contenidos. Tras un tiempo de actuación de unos 30 minutos, el agua pasa a ser potable. Gracias al efecto remanente del cloro, continúa siéndolo algunos días (en función de las condiciones de almacenamiento).
Filtración en arena
El filtro de arena es un método de tratamiento del agua ecológico, relativamente sencillo y poco costoso. Su principio consiste en hacer percolar el agua a través de una capa de arena. Existen dos tipos:
- Filtro de arena pretratamiento: Cumple el mismo papel que la filtración por telas. En general, es más eficaz, y presenta las mismas ventajas e inconvenientes.
- Filtro de arena biológico: Este filtro constituye un medio de filtración y de descontaminación en sí mismo.
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Método SODIS
El método SODIS es perfecto para el tratamiento del agua para beber en los países en desarrollo, ya que solo necesita luz solar y botellas de plástico transparente ligero : el denominado PET (tereftalato de polietileno).
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Las botellas de PET transparentes se llenan de agua y se exponen al sol durante seis horas. Los rayos UVA contenidos en la luz solar matan los gérmenes infecciosos, como virus, bacterias y parásitos (Giardia y Cryptosporidia). Este método también funciona cuando las temperaturas del aire y el agua son bajas.
Cabe señalar que beber un agua turbia no es dañino para la salud, pero está comprobado que a mayor turbiedad, hay mayor partículas en suspensión, lo que incrementa el riesgo de refugiar bacterias, virus y protozoos patógenos, y disminuye la eficacia de los desinfectantes que se le aplican para que sea un agua apta para el consumo humano.
