La siguiente historia forma parte de la tradición oral del estado de Tabasco, bien puede tratarse de una pieza de ficción o pertenecer al imaginario popular. Algunos de los relatos que aquí publicamos son dados por verdaderos entre quienes afirman haberlos vivido, sin embargo, en la presente sección simplemente difundimos estos contenidos para que nuestros queridos lectores pasen un rato entretenido.
Dentro de los relatos que cuenta la gente sobre apariciones, hay una que ocurre en un hospital de Cárdenas, donde algunos de los pacientes, afirman que enfermeras fantasma los han cuidado.
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Como en muchos de estos relatos, no hay nombre de quién vivió la experiencia paranormal y todo inicia con una tragedia, la cual le ocurrió a las trabajadoras de la salud.
¿Qué le sucedió a las enfermeras?
Se dice que tras una jornada de trabajo salieron del nosocomio, era de noche, iban en un transporte a sus casas, pero nunca llegaron, pues tuvieron un accidente.
Los paramédicos al llegar al sitio del percance encontraron a las mujeres con graves heridas, por lo que requirieron ser hospitalizas; en las camas fueron muriendo una por una, sin embargo, momentos antes de pasar al más allá, las pacientes mencionaban el nombre de las fallecidas. Así fue hasta que todas murieron.
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A los médicos le causó extrañeza, pues la condición en que se encontraban las enfermeras les hacía imposible saber sobre el deceso de su otra compañera. Tiempo después, los enfermos internados comentaban que la enfermera tal, los había cuidado, cosa imposible, ya que era una de las víctimas de aquel accidente.
¿Por qué deambulan en el hospital las enfermeras fantasma?
De acuerdo a quienes han tenido estos avistamientos lo que llama la atención es su vestimenta, que parece pasada de moda. Al relato agregan que son muy amables las jóvenes.
Así van de pasillo en pasillo, reconfortando a los enfermos, aunque estén desahuciados su sola presencia los alivia, llevando el mensaje que todo estará bien, pues su hora no ha llegado.
Sobre su presencia, unos dicen que son sus almas penando; otros, que tienen permiso para seguir realizando su labor: acompañar a las personas a la otra vida.