Tijuana.- Xolos mordió una vez, pero fue insuficiente para liquidar a una frágil versión de Rayados, 1-1 final en la frontera. La mejor ofensiva del torneo (Monterrey) sacó una renta positiva del equipo más sólido en defensa.
EL JUEGO
La Pandilla intentó a través de un escopetazo de Pabón que desvió un lance colosal de Lajud. En segunda jugada, el arquero mexicano se levantó para tapar en dos ocasiones los remates de Albertengo.
Las cosas se inclinaban a favor de los perros. Monterrey ya estaba controlado y sin la conexión de los primeros minutos. Así que el “Quick” Mendoza penetró por izquierda, se sacó al arquero e impactó por abajo; una acción que fue cortada en la línea por un zaguero visitante.
La Pandilla, en un latigazo, encontró a Avilés Hurtado. El colombiano abrió a Dorlan Pabón, astuto y calculador, sorprendió fuera del área con un fogonazo de derecha que horadó a Lajud en las postrimerías del primer lapso. Con ese tanto regio y un noqueado Tijuana (0-1), el árbitro dio paso al descanso.
Xolos remó contra corriente en la reanudación. En principio fue víctima del nerviosismo, ya que un parpadeo defensivo le puso en bandeja de plata el segundo a “Ponchito” González, quien fue forzado al error por otra intervención del portero fronterizo. Hasta que los locales encontraron la calma en los pies de José Rivero. El uruguayo, en tiro libre directo, mandó la pelota a las redes luego de una magistral ejecución que dictó el 1-1 en un momento crucial del cotejo.
A partir de esa acción se contagió la oncena canina, que mordió dos veces más con la presencia de Gustavo Bou, el último arribo estuvo a unos centímetros de concretar el segundo. Los pupilos de Diego Cocca se vieron superiores a los norteños en el ocaso de la contienda, mas no pudieron dar la mordida que diera vuelta a la eliminatoria, por lo que el empate (1-1) beneficia a Rayados de Monterrey por el gol de visitante.