La emisión pasada del Atelier contó con la presencia de la escritora, conferencista y coach Margarita Castillo Laviada, quien también es química de profesión y tiene una maestría en administración.
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En esta ocasión nos presentó su más reciente libro “Ines, valiente o rebelde”. Margarita contó que desde primaria le gustaba escribir, incluso cuando jugaba con su hermana esta le decía, “vamos a jugar muñecas” a lo que ella le respondía que jugaran a inventar historias en su mente.
“Vivía yo en un mundo de inventar historias y me gustaba escribir novelas… Siempre me ha gustado muchísimo escribir y conforme he ido creciendo he tenido más cosas que decir y se volvió como una necesidad”. Mencionó. Señaló que aunque desde pequeña tenía el gusto por la escritura, la realidad es que le gustaban muchas cosas, ya que le gustaba todo lo que tuviera que ver con investigación.
“Yo quería ser química para dedicarme a la cosmetología, a investigar cosas, a descubrir y bueno, finalmente me dediqué a la química clínica”. Expuso. Dijo que estuvo en Tabasco durante muchos años trabajando en una clínica de fertilidad, sin embargo en el momento en el que comenzó a tener más contacto con las personas que atendía, que veía sus problemas y su parte interior, le empezó a traer más su historia personal.
“Por qué las personas hacemos esto , que nos mueve a esto o como poder ayudar a pasar tal problema, porque muchas veces todos los problemas emocionales se somatizan y llegan a volverse enfermedades en el cuerpo, por eso comencé a estudiar coaching”.
Expuso que también comenzó a interesarse en el tema de la violencia , ya que era un tema que le inquietaba mucho, sobre todo la violencia laboral. “Veía que en el lugar en el que yo estaba se trataba mal al personal y yo decía, es que esto por qué ocurre, por qué el personal que trabaja en un lugar no es feliz y esto pues disminuye la productividad también.
Dijo que le comenzó a llamar la atención la motivación de las personas y una cosa fue llevando a otra y ahí comenzó a estudiar coaching. Mencionó que en las empresas se busca más en castigar en lugar de motivar por lo que la gente logra. “Cuando tú tienes un ambiente de trabajo donde la gente está feliz, obviamente los resultados con los clientes son muchos mejores, pero venimos todos de culturas de hace años, donde la parte antes era de tal a tal hora”. Explicó.
En cuanto a su novela, mencionó que muchas de sus lectoras le mandan mensajes donde le dicen “todas somos Ines o todas tenemos un poquito de Ines”.
“Ines surge en una de mis prácticas de coaching, tenía que completar 700 horas de práctica y estas horas las fui haciendo con muchas mujeres y me fui encontrando con una serie de historias… quise hilar en la historia de una mujer, los diferentes casos que vivían muchas y hacer un compendio” dijo.
Señaló que cada que tiene un problema busca un libro que resuelva eso, por eso se le ocurrió crear un libro para todas aquellas mujeres que sienten un vacío o que están cumpliendo con todo lo que les dijeron que tienen que hacer.
“Hay muchas mujeres que cumplen con todo esto y se sienten vacías, entonces comienzan a pensar que algo está pasando mal con ellas” dijo. Mencionó que las mujeres crecen en una cultura en la que tienen que aguantar la violencia, lo cual queda grabado en su cuerpo.
“Nosotras venimos de esa generación de trauma de años atrás y estamos acostumbradas y nos han enseñado a bajar la cabeza y obedecer, porque si no perdemos al hombre que nos va a hacer sobrevivir. Porque así nos enseñaron las abuelas pero tal vez eso ya no es válido hoy”.
Expuso que a las mujeres no se les enseñó a cuestionar, por lo que buscó crear un libro que sensibiliza en el tema de la violencia. Señaló que la historia de Inés es sobre una mujer que sufre violencia digital, ya que su pareja sube sus fotos íntimas a redes, la ofrece, agarra a golpes a su hijo y se da cuenta de que está viviendo violencia.
“Porque muchas mujeres piensan que si no hay golpes no hay violencia, pero que tal cuando la pareja llega y no te dirige la palabra cuatro días, eso es violencia” Dijo.
Incluso mencionó que poner apodos es agresión, aunque lamentó que para las mujeres admitir que sufren violencia es vergonzoso, sin embargo, hizo un llamado a las mujeres a que no tengan miedo de decir quiénes son sus agresores.
Señaló que es importante mencionar que la violencia es generacional y que en muchas ocasiones son las madres las responsables de que los hombres sean machistas, ya que refuerzan las ideas del padre. “Se tocan muchos temas de forma muy interesante, a mi me gusta mucho leer, me chocan los libros aburridos, yo traté de hacer un libro que tuviera interés, te te piques” dijo
Además trato de hacer un libro que fuera fácil de leer e interesante, además de que al final del libro escribió una parte de ejercicios con preguntas que le pueden servir a cualquiera en cualquier situación de vida.
También habló sobre la violencia vicaria, donde mujeres se ven sometidas por hombres de mayor poder, ya que muchas de ellas estudiaron una carrera pero nunca ejercieron.
“Los influyentismos también hacen que la mujer se someta, entonces hay muchos tipos de violencia de los que hay que hablar y creo que tenemos que empezar de hablar” Mencionó.
Finalmente dijo que en sus redes sociales tiene muchos ejercicios para identificar si se está viviendo violencia y mencionó que su mensaje es ayudar y apoyar a las mujeres.