Este pasado viernes nos acompañaron en nuestro programa de El Atelier los actores de teatro Samuel Saldaña y Karla Urbina quienes han participado en diversos talleres y obras teatrales.
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Samuel contó que en su niñez no fue el típico niño que siempre quería participar en todas las obras de teatro, sino que al contrario era tímido, casi no le gustaba socializar, además de que no le gustaba hablar en público. Mientras tanto Karla mencionó que ella sí era muy participativa y le gustaba estar en todos los eventos que realizaba su escuela, ya que desde muy pequeña le gustaba dibujar, bailar y hacer obras de teatro.
También contó que ha llevado talleres de expresión vocal para poder desarrollar su voz, mencionó que en los primeros cursos que estuvo estudió la voz, vio los tipos de ejercicio que podía realizar como calentamiento y preparación. Samuel pese a ser introvertido es director de la compañía teatral Focus donde explicó que la idea de la realización surgió a partir del primer taller que tuvo. Mencionó que buscaban un texto pero no lograban encontrarlo.
“Hasta que encontramos el de la obra que todavía tenemos que se llama ´Lo que queda de nosotros e invitamos a Karla, como ya habíamos hecho teatro con ella, ya nos conocíamos, sirvió mucho que supiéramos cómo trabajar” mencionó.
Contó que conoció a Karla cuando formaban parte de un taller en la Casa de la Cultura y ya habían estado en escena en alguna obra, y dijo que afortunadamente aún siguen colaborando juntos, pese a que hacer teatro es difícil.
“Afortunadamente nosotros cuando empezamos, todo nosotros lo costeabamos, ahorita hemos tenido la oportunidad de poder vender a veces la obra o ponerla en boletaje en Cárdenas y de ahí va saliendo” dijo. Explicó que siguen poniendo de su bolsa, pero tienen un banco para que cuando generen algo se destine por partes iguales. “Tenemos esa manera de trabajo y afortunadamente ha funcionado”
Explicó que actualmente solo hay cinco personas en dos obras, debido a que la pandemia ha dificultado un poco la labor, aún así consideró que han tenido apoyo por parte de los teatreros tabasqueños y el público en general.
“La pandemia nos ayudó, aunque hubo muchas personas con grandes trayectorias que pararon, algunas presentaciones las hicimos virtuales en Villa, otras en Cárdenas y en otros municipios, pero sí, nosotros no nos detuvimos como tal” mencionó.
Dijo que afortunadamente en la pandemia les fue bien, ya que en ocasiones hay proyectos que funcionan años después, pero en la obra que tienen les ha ido bien por lo que han recibido diversas propuestas para ir a otros municipios.
Por su parte, Karla mencionó que estuvo llevando talleres desde el 2017 al 2019 en la Casa de la Cultura donde estuvo formándose, además de que le gusta seguir aprendiendo para profesionalizarse. Samuel contó que la compañía ha estado en varios estados presentándose y también han realizado diversos talleres, sobre todo para las personas jóvenes que comienzan a mostrar interés por el teatro.
“Hemos tenido buena respuesta, hemos tenido invitaciones de regresar, a Puebla nos invitaron para regresar y en Orizaba también quedamos por ahí de regresar en algún momento. Afortunadamente nos ha ido bien” explicó.
Karla contó que están promocionando la obra ´Lo que queda de nosotros´ donde su personaje es Nata la cual es una adolescente que cuando era pequeña pasó por la pérdida de su madre.
“Nata no era muy cercana a su mamá porqué su mamá tenía el pensar de que la gente no se le debía apreciar mucho porqué morían pronto, entonces Nata se quedó con esto. A raíz de que su mamá muere Nata tiene un lazo más fuerte con su padre por el hecho de que es su papá, es su persona más cercana pero con el paso del tiempo adopta un perro, pero el papá de Nata muere, entonces Nata cae en depresión lo que es su proceso de duelo, entonces no quiere seguir teniendo esos vínculos afectivos con nada ni con nadie, y es por esa razón por la que ella decide abandonar a su perro” contó.
Karla mencionó que conforme se va desarrollando la historia su personaje se da cuenta de que lo que hizo no está bien porque no era la manera de pasar por ese duelo y “toto” su perro también realiza un recorrido de su vida durante la obra para que al final ambos se reencuentren y Nata le pida perdón por haberlo abandonado.
Samuel contó que cuando estaban realizando la idea del montaje estaban buscando los tipos de voz que cada personaje tenía que interpretar. Explicó que la obra está escrita para el público de todas las edades, pero específicamente el texto de esa obra tiene un premio como mejor obra de teatro para niños.
“Nosotros la tratamos de adaptar para un público de 6 años en adelante, obviamente cuando vamos quizá a una primaria debemos adaptarnos un poco más” contó, al mismo tiempo mencionó que la obra dura alrededor de 50 minutos.
Además explicó que la obra como tal no tiene escenografía ya que solo se utilizan dos tubos y una mesa, ya que gran parte de la obra transcurre sobre la mesa. Mientras tanto Karen mencionó que la obra es expresión corporal y voz. “Más que nada narrándola a partir de los diferentes personajes que cada uno de nosotros realizamos”