/ martes 8 de octubre de 2024

Punto y Aparte / La izquierda pierde a Ifigenia

Quien fuera un icono histórico de la izquierda mexicana, rindió tributo a la Madre Tierra. Ifigenia Martínez, presidió la pasada ceremonia de transición, en la que entregó la banda presidencial a Claudia Sheinbaum, en lo que fue su última aparición pública.

A pesar de su quebrantada salud, lo hizo con emoción, y, compromiso, con la causa que toda su vida, defendió.

Antes, en el 1º de diciembre de 2018, el ex presidente López Obrador llegó del brazo de ella, a San Lázaro, para rendir protesta constitucional, como el primer mandatario emanado de un partido de izquierda.

El 2 de junio, cuando la ahora presidenta Claudia Sheinbaum, acudió a las urnas para emitir su voto, escribió el nombre de la economista en su boleta electoral como signo de respeto:

Con reconocido y aplaudido perfil conciliador, fue una figura central en la política mexicana. Siempre demostró una especial habilidad para actuar con neutralidad, gestionar los intereses de Morena y escuchar los planteamientos opositores.

Tal fue el respeto y reconocimiento que emanaba, que, fue designada como presidenta de la Mesa Directiva, con 496 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones.

Todos sus alumnos la admiraban, todos sus compañeros la apreciaron, y sus contados adversarios, la respetaron.

Ifigenia Martha Martínez y Hernández, nació el 16 de junio de 1925, en la ahora CDMX. Hija de doña Concepción Hernández Garduño, y, de don Jesús Martínez Elizalde, un ferrocarrilero, de quien heredó los ideales de izquierda, ya que militaba en el Partido Comunista Mexicano (PCM).

Sus primeros estudios, los cursó en el Colegio Alemán, después ingresó a una secundaria pública en Mixcoac.

Estudiante de la Escuela Nacional Preparatoria. Hizo dos bachilleratos: el de leyes que se acababa de inaugurar y fue la primera generación; y el de economía, carrera a la que se inclinó.

Licenciada en Economía por la UNAM (1942-1946). Cursó la Maestría en Economía, en la Universidad de Harvard (1947-1949; y, el Doctorado en Economía, (2011-2013).

En su larga trayectoria política, perteneció a: Morena (2018-2024); PRD (1989-2018); y, Partido Revolucionario Institucional (1966-1988). Como dato curioso, para inscribirse al PRI, necesitó del permiso de su esposo.

Diputada federal, en cuatro ocasiones: en 1976, 1994, 2009 y en 2024; senadora del Congreso de la Unión en dos periodos: de 1988 a 1991 (LIV legislatura) y de 2018 a 2024 por Lista Nacional, presidenta de la Mesa Directiva de Decanos;

También fue integrante de la Asamblea Constituyente de la CDMX, de 2016 a 2017. Nadie había llegado a su edad, como legisladora: 94 años de edad.

Embajadora y representante alterna de México en Nueva York ante la ONU. 1980-1982.

Subdirectora general de finanzas del Fondo Nacional de Fomento Ejidal (FONAFE). 1974-1976. Directora de Programación y Descentralización Administrativa de la SHCP. 1972-1974.

Jefa de asesoría económica de la Presidencia de la República. 1965-1970. Asesora del titular de la SEP. 1958-1959. Jefa de la Oficina de Política Fiscal de la SHCP.

Subjefe del Departamento de Subsidios de la SHCP. Jefa del Departamento de Análisis Fiscal de la SHCP.

Directora de la Escuela Nacional de Economía en la UNAM. Miembro de la Comisión Consultiva de Política Exterior de la SRE.

Asesora económica del jefe de Gobierno del Distrito Federal. Subsecretaria de Descentralización Administrativa de la SHCP. Directora del Fondo Nacional de Financiamiento en la Actividad Empresarial del Estado.

Como anécdota, cuando el hegemónico PRI, la hace diputada federal, le asignaron la presidencia de la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados. ¡Votó en contra! de una iniciativa presidencial.

En su casa de Coyoacán se reunían sus contertulios de izquierda. Frente a donde se sentaba, ponía un grillo de plata. Decía que la grilla se hace de noche.

Su inercia por la política, no le permitió continuar en el ballet que practicó, con maestras, como Gloria y Nelly Campobello.

Definitivamente, México perdió a una de sus pioneras de la lucha de las mujeres por el ejercicio de sus derechos políticos, así como de la lucha de las izquierdas en México. Ya descansa en Paz.